30.6.09

Respira

La piscina como lugar común

La primera noche que paso en Lima, veo, en el Teatro Británico, una obra de teatro escrita por Eduardo Adrianzén y dirigida con oficio aunque sin mucha pasión por Roberto Ángeles. La pieza, ganadora del Concurso de Dramaturgia Peruana 2008, se titula Respira.

La metáfora que guía la trama y organiza la puesta en escena es una fusión de lugar común y baúl de sastre: para vivir una vida plena, o al menos no del todo plana, hay que lanzarse a la piscina, zambullirse, aprender a nadar y vencer el miedo a la amenaza del entorno.

Los demás elementos no son menos superficiales ni menos esperables: hay una caricatura ingrata de la izquierda legal de los ochentas, una absurda deconstrucción de la imagen de Cristo, una vulgarización pseudo-crítica de la Iglesia Católica, y, lamentablemente, una torpe idealización de la juventud senderista, caracterizada, a través del retrato de un personaje chato y monodimensional, como una generación de utopistas genuinamente comprometidos con una causa equivocada.

La ficción aguanta siempre, y muchas veces sobrevive con salud, las peores distorsiones de la historia. Pero en el caso de Respira, más allá de las simplificaciones y las perogrulladas, más allá de las desinformaciones y la pura demagogia, las distorsiones sirven para proponer empatías estólidas.

Construir a Jesús como un sedicioso judío que luchaba violentamente contra el Imperio Romano, para luego identificarlo simbólica e icónicamente con un joven peruano de clase media que opta por el terrorismo a principios de los ochentas, por ejemplo, no es problemático por la licencia contrafáctica que esa operación implica, sino por la evidente incomprensión que ese paralelo demuestra.

Culpar a la generación izquierdista de los sesentas y setentas por haber guiado a sus hijos en dirección a Sendero Luminoso, para mencionar otro caso propuesto en la obra, es una esquematización escandalosa, que, además, resulta insoportablemente agraviante cuando uno considera la dureza de la lucha que sostuvo un gran sector de la izquierda legal contra Sendero Luminoso en las décadas siguientes.

Al final de la pieza, el público, acaso sin distinguir claramente el alcance de su reacción, aplaude de pie la escena en que el protagonista (sobreactuado por Leonardo Torres) decide "lanzarse a la piscina" a impulso de la memoria de su hermano mayor, el terrorista buena gente: hay que creer en algo, lo que sea, sea bueno o sea malo, y zambullirse en ello.

Quienes no aplaudimos al final hubiéramos esperado que, emergiendo de alguna forma entre la marea de caricaturas, estereotipos y obviedades, una noción más simple y a la vez más compleja se hubiera abierto paso: la idea de que no en todas las piscinas es bueno sumergirse, unas pueden estar llenas de agua, otras pueden estar llenas de sangre, la propia y la ajena.

(Me dicen que algunas voces de la Iglesia Católica se han quejado por la caricatura de Jesús que la obra ofrece: es absurdo hacerlo por razones ideológicas, y es oprobiosa la intención de censurar. Pero no es absurdo sentirse mal ante la monstruosa torpeza del retrato, sólo por una cuestión de estética y una preocupación por la inteligencia que cabría esperar de un dramaturgo con premios y experiencia, como Adrianzén).

20 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo. Lo que llama la atención es la complacencia de la crítica. Si bien hay alguna actuaciones interesantes, esta "Respira" es irrespirable. ¿Se imaginan a un actor que actúa como payaso en la TV haciendo de Jesucristo? Se baja de la cruz y dice que Lázaro no resucitó sino que estaba borracho y cuando se le pasó la borrachera se levantó y se echó a andar. No se trata de defender a una iglesia que tiene mucho de que criticarla, pero una caricatura tan grosera avergüenza hasta a los ateos. Es una pieza grotesca, con todos los lugares comunes en contra la Iglesia, con todos los lugares en contra de la izquierda caviar, y finalmente deslizando cierta apología del terrorismo y toda esa estafa a 40 soles la entrada. El público aplaude porque en el teatro hay que aplaudir. Aprueba una critica que es cómplice del más grande mamarracho del teatro peruano reciente. !Qué pena!

Anónimo dijo...

Gustavo, ¿y qué pasó con Quipu?

Irrealismo Mágico dijo...

¿Y por qué en las películas siempre hay alguien que lleva verduras al teatro?

Anónimo dijo...

"la idea de que no en todas las piscinas es bueno sumergirse, unas pueden estar llenas de agua, otras pueden estar llenas de sangre, la propia y la ajena." Uhhhh

Bueno, si mal no recuerdo, doctor Faveron, usted es defensor del Estado de Israel, el cual fue fundado con el apoyo fundamental del sionismo, una ideologia extremista que derramo mucha sangre, la propia y la ajena.

A lo que voy es que esa piscina, que es el sionismo, tuvo un efecto positivo en esa region del mundo, es decir, instaurar, una ejemplar democracia, con sus fallas, pero democracia al fin.

Sin la lucha del movimiento sionista, una ideologia extremista, Israel no habria sido factible como Estado o no lo cree usted?

Me gustaria saber, que tipo de piscina es el sionismo para usted?

Por otro lado, hay un claro sesgo ideologico o pre-juicio en su critica a la obra de Adrianzen, mas que una critica que se enfoque en el nivel artistico de la obra.

Un poco mas de humildad no le vendria mal, pero eso es impensable en usted, una persona politicamente correcta, multiculturalista, defensor de las minorias y un buen liberal o esas, acaso, son solo sus personaes para parecer atractivo en el mercado de la academia americana?...

La derecha posmoderna se presenta con muchas caretas en este siglo XXI, doctor Faveron, pero ojo no deja de ser derecha...

Lucio Suárez dijo...

Terriblemente atinentes las preguntas del anónimo que pregunta sobre la piscina del sionismo.
No he presenciado la obra de adriansén. Sin embargo, conociendo las pulsiones del peruano, como las conozco, de seguro no escapa a esas taras o debilidades, mejor, que suele mostrar. De seguro, no es distinto que las estereotipaciones de Cueto, o del propio thais. Nuestro Thais este que en su última novela, nunca deja de alternar referencias a divas del cine, con plañideras recordaciones a la muerte de su hijo.
Sin embargo, gustavo jamás tendrá sangre y nervio para desbaratar estos defectos en las obras de sus amigos. Entonces, aparece esta otra tara o debilidad muy peruana entre nosotros. A saber, la de valorar el mundo, o por lo menos el entorno, desde dos lógicas. La de Mi grupo, mi fratria, Y LA LÓGICA DE "EL RESTO", O TAMBIÉN LLAMADA: "LA GENTE".
Cuando alguien de mi grupo parece alejarse, parece distanciarse del GRUPO o FRATRIA, como le pasó al profesor Gamio, entonces, lo trato como a "la gente", como "al resto".
Lo grave de todo esto, es que este rasgo no es privativo de Gustavo. Ojalá solo fuera de algunos. Es un rasgo desgraciadamente muy generalizado entre nos. Por eso, creo que no es ocioso visibilizarlo.
De otro lado, creo que no hay, no debería haber problema en decir esto, a riesgo de que gustavo se enerve y saque la automática. El problema es no decirlo, y hacer como que estas escenas, estas las de las valoraciones disímiles, son solo defectos aislados. Para el caso da lo mismo que Gustavo dispare, o que salga con el consabido: "Get a live".
Saludos.

El Conde de Sarcq dijo...

Anónimo: Tienes razón: no nos podemos oponer a las violaciones porque de ellas nacen niños muy lindos.

Anónimo dijo...

El sionismo no es "una ideología extremista". Es el hecho de buscar un Estado para el pueblo judío, no otra cosa. No es más extremista que los otros nacionalismos de la historia.

El uso de "sinonista" como desclaificación es solo una muestra de antisemitismo.

Lo que sí es extremista es el modo en que se comportan las administraciones israelíes de los últimos años, apoyadas por un electorado cada vez más conservador.

Del mismo modo, el nacionalismo palestino de grupos como Hamas también es absolutamente extremista.

Anónimo dijo...

tendrías que ver lo que hace con passolini y con heraud. realmente adrianzén es el agente de la telenovelización del teatro peruano

Anónimo dijo...

Otra vez la automática carta de "antisemita" para descalificar un comentario, doctor, qué fácil, no?:

["El sionismo no es "una ideología extremista". Es el hecho de buscar un Estado para el pueblo judío, no otra cosa. No es más extremista que los otros nacionalismos de la historia.

El uso de "sinonista"[sic] como desclaificación es solo una muestra de antisemitismo.]

Pues, claro que el sionismo es una ideología extremista o una piscina para nado sincronizado, como lo son los diversos nacionalismos de la historia, como lo es Hamás también, eso es indudable, pero con usted no se puede dialogar...

Hay extremistas en todos los bandos...

La víctima y el verdugo (EL PAIS/ 17/12/2008)

http://www.elpais.com/articulo/opinion/victima/verdugo/elpepiopi/20081217elpepiopi_3/Tes

Hitler fue "un genio militar incomparable" que "dotó a Alemania de orden público y de un régimen ejemplar con un sistema judicial apropiado". Quien proclama tanta admiración por el responsable del exterminio de más de seis millones de judíos se llama Moshe Feiglin y está en el movimiento por el Liderazgo Judío, y forma parte del ala más extremista del Likud, el partido conservador israelí que lidera Benjamín Netanyahu, firme candidato a ganar las elecciones legislativas del próximo 10 de febrero. ¿Quién se atreve ahora a cuestionar esa vieja sentencia que aconseja conocer la historia para no cometer los mismos errores?

Ahora bien, ¿cuáles fueron para Feiglin los errores de aquel "régimen ejemplar"?

En un manifiesto que publicó hace cinco años en la página web de su movimiento, y que acaba de desaparecer de la Red en cuanto se ha visto que Feiglin será con toda seguridad uno de los parlamentarios elegidos en las listas del Likud (va en el puesto 20), cuenta lo que haría "el día después" si fuera elegido primer ministro.

Lo primero: rezar una plegaria de agradecimiento en el Monte del Templo de Jerusalén. Inmediatamente después sacaría a Israel de las Naciones Unidas, cerraría las embajadas de su país en Alemania y en otras naciones antisemitas, ajustaría los horarios escolares al calendario judío y ordenaría que acabara el flujo hacia la Autoridad Palestina de fondos, bienes, agua, electricidad y comunicación...

En la inspección que hace uno de los líderes nazis a los cargamentos destinados a la construcción de los que serían los campos de exterminio durante
la Segunda Guerra Mundial, que Vasili Grossman describe en Vida y destino, observa que hay allí "piezas sueltas de varios mecanismos, canalones, cintas transportadoras aún sin montar, tubos
de diferentes diámetros, sopladores y ventiladores, trituradoras de huesos...". Feiglin reconoce admirar el orden público del régimen nazi. ¿Y qué opina de su eficacia como maquinaria de destrucción?

El líder más extremista del Likud considera que el sionismo es racista y que los palestinos son inferiores. Que sus antepasados fueran víctimas del gran verdugo nazi no parece importarle demasiado. ¿Cuáles son, pues, las lecciones que Feiglin extrae
de la historia?

Anónimo dijo...

No entiendo a los comentaristas, salvo al que hizo el primer comentario. De lo que se trata es de la pieza de teatro "Respira". Lo que sí llama la atención es que al parecer Gustavo Faveron ha dado en el clavo sobre el tema de los neo-nazis en el Perú. Han saltado hasta el cielo. Y al parecer hay algunos enfermos que los apoyan. Hace falta un libro que ahonde más sobre este triste problema de intelectuales peruanos anti-semitas y pronazis. ¿Y Respira? No la he visto, pero si es cierto lo que dice el primer comentario, curiosamente esta pieza estaría vinculada a los ataques neo-nazis, aunque usted no lo crea.

Lucio Suárez dijo...

Al último anónimo, el de 7/02/2009, el problema no es la obra de Adriansén. El problema es la burda estereotipación, y la incoherencia. La estereotipación ingenua o zafia, no es exclusividad de Adriansén. El problema que Gustavo, solo apunta, a cierto lado. El resto de desaciertos, como en este caso la estereotipación, no los ve, no los somete a crítica, no los toca.
El otro problema, es que Gustavo recusa la creencia ciega. Condena con furia y sin contemplaciones, el lanzarse a cualquier piscina. Y, sin embargo, no está dispuesto a cuestionar otras piscinas de sangre a las que él suele lanzarse con fruición.
Cuestionar esto, estimado anónimo, no tiene que ver nada con temperamentos neonazis. No hay que dar pábulo a la paranoia.
Saludos.

Gustavo Faverón Patriau dijo...

¿Que yo me lanzo a piscinas de sangre con fruición? ¿Quieres decirme, Lucio, de dónde has sacado tamaña estupidez?

¿Y cómo así puedes comparar los defectos de la novela de Iván (tu aparente obsesión) con una obra teatral que no has visto?

Lucio Suárez dijo...

A ver Gustavo. Veamos la estupidez. Tú defiendes las políticas bastante sangrientas de Israel. Justificas, casi automáticamente operaciones como "Plomo Fundido". No cuestionas, no recusas la cínica teoría de la "legítima defensa". Que incluye el uso de bombardeos con fósforo blanco. Pero, además, lo haces con vehemencia digna de mejores causas. Esa incoherencia, que peor que estupidez, Gustavo, es deshonesta. Te duele que te diga eso?. Bueno pues, la vida es dura Gustavo.
Sobre las ficciones de tus amigos, si tú puedes afirmar sin rubor que en dichos libros no existe estereotipación alguna, cualquiera, yo por ejemplo, puedo comparar las vocaciones estereotipantes limeñas, sin necesidad de ir a la obra de Adriansén.
De otro lado, tendrías que ir más allá del berrinche groseril, y remitirte a desmentir las ideas. En todo caso, te pido algo Gustavo. No me inquieta que me insultes. Ya ves que no tengo inconvenientes en poner mi nombre. Pero, si te animas a soltarte con majaderías, luego, no recortes mis intervenciones. Qué dices. he?. Yo te prometo que no voy a salirte con agravios.

Gustavo Faverón Patriau dijo...

Has dicho, Lucio, que yo me lanzo a piscinas de sangre con fruición. En caso de que no seas capaz de comprender las palabras que tú mismo dices, te explico: estás diciendo que yo siento PLACER, GOCE y FELICIDAD ante la matanza de inocentes. Eso es una mentira, una infamia, una arbitrariedad y una bajeza sin medida. Y también es una estupidez que te pinta de cuerpo entero. Si quieres decir algo así sobre mí, por lo menos haz el intento de demostrarlo de alguna manera.

Anónimo dijo...

No he visto la obra de Adrianzen, pero he visto parte de su telenovela sobre Magaly, y me parece que en base a tu critica ambas cosas se parecen mucho. Estereotipos, frases rimbombantes, personajes huecos que recitan textos pretenciosos y politicamente correctos (insufriblemente correctos) Al lado de ese guion, las que produce televisa son merecedoras de un Tony por la densidad de sus personajes.

Lucio Suárez dijo...

OK Gustavo. Te inquieta la palabra fruición?. Vale. La sacamos. Dejémoslo en pasión.
Pero, cuando tú hablas de piscinas de sangre para demonizar otras pasiones, defendiendo como defiendes las barbaries del ejército israelí en Gaza, la inconsistencia de tus descalificaciones da para cualquier adjetivo, si el problema es de adjetivos.
¿Mentira?, ¿infamia?, ¿bajeza?. Bueno, consigno estas que son palabras y razonamientos tuyos a propósito del conflicto en Gaza, a principios de año:

18.1.09
Los niños de Gaza
El crimen de guerra y sus responsables
No
""Quizá valdría la pena buscar la explicación para todas esas cifras"".

""Los miembros civiles de Hamas, entonces, son también un enemigo activo del pueblo y el Estado israelíes"".

"Sobre el triste y doloroso tema de los niños palestinos: Hamas ha sido denunciado en innumerables oportunidades por el notorio abuso al que somete a los niños de Palestina, a quienes entrena militarmente, en cuyas manos pone armas y a quienes coloca como carne de cañón en zonas de conflicto, además de acostumbrarlos a la idea de que morir en un ataque suicida es una inmolación gloriosa y deseable".

"Quiza eso ayude a los lectores de este blog a comprender por qué, en la lucha del Estado de Israel contra Hamas, se produce un número tan elevado de víctimas menores de edad".
"Las armas a las que se alude son los llamados cohetes Qassam. Los cohetes Qassam son de tres tipos; el Qassam 3 puede pesar hasta noventa kilogramos, medir dos metros de largo y lograr un alcance de 10 kilómetros".


Ejerces, con delectación, si no te gusta lo de fruición, una retórica, una maroma dialéctica, todo ¿para qué?. Para convencernos, o, talvez, para convencerte de la justeza de la masacre en Gaza. Y luego, te sientes en la autoridad de execrar extremismos y fanatismos como el que Adriansén intenta sublimar en su obra. Cuando menos es un abuso de tu parte, no crees?.
Seguimos.

Anónimo dijo...

Primer anónimo: no hay crítica teatral en el Perú. No es crítico ese señor que de hablar de cine pasó a hacer pichangas textuales con el teatro de moda en Lima, en Elcomercio. Tampoco Planas tiene el rigor para salir del circuito minúsculo de las 4 salas de Miraflores (4: Isil, AF, ICPNA; Británico), y eso siempre bajonea sus recuentos anuales que suelen suer un alegato a la exclusión.
El último crítico fue probablemente ALAT. La Torre se metía hasta en las Muestras de Teatro en Andahuaylas en pleno conflicto armado. Y nunca dejó de ser un periodista profesional, ojo.
Por otro lado, por crítica me estoy refiriendo a un observador imparcial que opera como conciencia dentro del público para opinar sobre los valores de una obra.
Las razones por las que no hay esos críticos en el teatro peruano son varias, la primera creo yo es el propio desdén de los medios por mantener periodistas con tal especialidad.
Ahora bien, mucha gente se mete a hablar de teatro sin hacer de eso su oficio, y los resultados a veces son impresentables, a veces son interesantes como es esta pequeña pieza de indignación sustentado y coherencia estética que es el post de Faverón. Pero un crítico teatral necesitaría seguir procesos completos de producción teatral y no solo opinar al vuelo, entender cómo se juegan las cartas de los medios culturales en Lima, el rol seductor de la TV para los actores y su influencia en el modo de representar, etc.
Críticos que se entiendan a ellos mismos como ese funcionario público del gusto teatral, muerto La Torre, francamente creo que desaparecieron.

Anónimo dijo...

Favi:
La cosa es clara: ese teatro no estaba a tu altura. Pero sí lo estaba, debo decir, de cientos de espectadores de la clase media peruana que sí requieren este pequeño aclaramiento de la propia identidad, que hasta eso es un negado. Que una obra no sea intelectualmente exigente para ti, no significa que no sea necesaria e imprescindible para su público. Un poco más de pragmática comunicativa, doctor!!

Pie de Atleta dijo...

Ánónimo del 05-jul: ¿Estás pidiendo que los Simpson bajen su calidad sólo para que sus criticas sociales sean más claras? ¡Nones!

Stinky Horn dijo...

que buena Pie de Atleta!