17.12.06

Caníbales

Recuerdo que hace unos años Ricardo González Vigil censuraba a Mario Vargas Llosa por la mala impresión que causaría en el extranjero el hecho de que en Lituma en los Andes se hablara de prácticas antropofágicas en la sierra peruana.

Lo recuerdo ahora porque hace un rato, viendo televisión, me topé con un episodio de una serie mediocre, Ghost Whisperer (sobre una chica que conversa con los muertos), que no me hubiera detenido a ver si no fuera porque, en el preciso instante en que pasé por ese canal, la protagonista de la serie se sentaba frente a una lap top para iniciar una búsqueda en Google con las claves "Peru" y "machiguenga".

¿El guionista sería un lector de El hablador?, me pregunté. Después de todo, El hablador es una de las novelas más leídas de Vargas Llosa en Estados Unidos en las décadas recientes (su éxito mayor es, sin duda, La tía Julia y el escribidor).

De pronto, en la siguiente escena, un antropólogo especialista en la Amazonía le explicaba a la heroína que los machiguengas, según él había atestiguado, eran en extremo primitivos, bebían pócimas extraordinariamente intoxicantes y, por cierto, tenían una inclinación común a la violencia que los llevaba a guerrear frecuentemente y, tras la victoria, a comer los cuerpos de sus vencidos.

El guionista, al parecer, había leído El hablador y Lituma en los Andes, y había dado con esta mezcla explosiva de ritual amazónico y antropofagia guerrera. O quizá sólo había leído Keep the River on Your Right, de Tobias Schneebaum, el delirante pintor neoyorquino que escribió hace unos años que a unas horas del Cusco había tribus caníbales con las que él había convivido por varios meses.

Ahora bien, para evitar que nuestra imagen de comegentes se propague, tendríamos que impedir toda posibilidad de difusión de algunas otras obras literarias: a López Albújar, por ejemplo, tendremos que requisarlo de todas las bibliotecas en las que alguien pueda echarle un ojo a su terrible (y notable) cuento El campeón de la muerte, en cuyo final un asesino se deleita con las vísceras de su enemigo (cosa que no está muy lejos de suceder en el famoso Ushanan Jampi, del mismo don Enrique).

Por suerte Ribeyro tuvo el cuidado de que el único antropófago de su obra fuera japonés (el de Al pie de la letra; aunque con él hay truco, porque fue un personaje real; ya les contaré la historia, que no tiene pierde).

De una vez podríamos hacer una cruzada regional, y ayudar a los argentinos, por ejemplo, a librarse también del estigma de la antropofagia, eliminando ejemplares del cuento L
os hombres fieras
de Roberto Arlt; la novela El entenado, de Juan José Saer, y el brillante relato Un descenso al infinito, de Guillermo Martínez (bueno, al menos yo creo que esa es una forma de antropofagia).

Los ecuatorianos nos agradecerán desaparecer cualquier copia de
El antropógafo, de Pablo Palacio. Los cubanos, que lo hagamos también con el cuento La carne, de Virgilio Piñera.

O quizá sea mejor no desaparecer esos textos, y seguir, metafóricamente, devorándolos una y otra vez. Por algún motivo, la antropofagia parece encenderle la luz del ingenio a muchos escritores de nuestro lado del mundo. De hecho, sin ir más lejos, he mencionado todos los textos hispanoamericanos canibalescos que me han venido a la memoria (tengo una frágil memoria) y, oh casualidad, todos ellos son excelentes.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí, todos ellos son notables. También habría que mencionar el cuento "Las ménades", de Julio Cortázar.

Miguel Ruiz Effio

Anónimo dijo...

uy carajo, una mancha en tu CV

Anónimo dijo...

uy carajo, una mancha en tu CV

Gustavo Faverón Patriau dijo...

¿Lo dicen por el error de ortografía o por el olvido de Cortázar? Creo que ninguna de esas cosas entra en un CV. (Y mi orgografía siempre ha sido horrorosa, dicho sea de paso).

Anónimo dijo...

Bueno, si el jurado del Premio de Novela "Julio Ramón Ribeyro", ha premiado una novela como "Capac Cocha", que desde el título promueve la noticia imperio incaico se hacían sacrificios humanos, preferentemente jóvenes vírgenes (según algunos investigadores, "niños")...
¿qué podemos reprocharle a "Ghost Whisperer?

Ingrid Gonzáles dijo...

Las obras citadas son en sobremanera reales y en la mayoría de casos magistrales, sin embargo el marco de esta serie "ghost wisperer" no lo es. Es simplemente una americanada más, entre misteriosa y romántica con un esposo que de hecho en la próxima temporada lo 'matan' porque es muy muy muy comprensivo (no debe ser republicano) pero volviendo al tema, en el marco de una serie mediocre, de veras que me ofendió mucho el capítulo sobre los Machiguengas y el dengue. Las naciones amazónicas se merecen mucho más que comentarios salpicados, y cruelmente manipulados, para realzar el dramatismo de una serie. Sé que hay una fracción de la población americana (la más culta y leída) que no tiene esa opinión de las naciones del tercer mundo, ni mucho menos de sus naciones indígenas (a las cuales no hemos hecho 'desaparecer' como ellos a los indios de su tierra) sino que saben tratar con dignidad a esta aldea global que hoy es el mundo.
Yo recién vi ese capítulo el fin de semana pasada. Supongo que no querrán hacer un capítulo de algún irakí preso en Guantánamo torturado y vejado que no puede pasar 'hacia la luz' porque quiere darle una patada a todos los que en nombre de no sé qué andan matando...
Sorry por el hígado, pero hace mucho no me ofendía tanto una americanada como lo hizo ese capítulo.
Que fabulosos escritores sigan hablando y escribiendo lo que ellos quieran, son personas con un talento fabuloso, lo que no tolero es que ignorantes e inescrupulosos tipos hagan gala de una realidad que desconocen y que por encima de eso no respetan.
Si alguien sabe cómo hacer llegar un escrito a la televisora respectiva, con gusto remito mi genuino disgusto (en inglés, por supuesto, JAMÁS leerán en español) y a ver si por el susto de una inminente demanda paran la mano y no ofenden... ya entre nosotros nos choleamos suficiente, no necesitamos que nadie más lo haga.

Ingrid Gonzáles dijo...

Las obras citadas son en sobremanera reales y en la mayoría de casos magistrales, sin embargo el marco de esta serie "ghost wisperer" no lo es. Es simplemente una americanada más, entre misteriosa y romántica con un esposo que de hecho en la próxima temporada lo 'matan' porque es muy muy muy comprensivo (no debe ser republicano) pero volviendo al tema, en el marco de una serie mediocre, de veras que me ofendió mucho el capítulo sobre los Machiguengas y el dengue. Las naciones amazónicas se merecen mucho más que comentarios salpicados, y cruelmente manipulados, para realzar el dramatismo de una serie. Sé que hay una fracción de la población americana (la más culta y leída) que no tiene esa opinión de las naciones del tercer mundo, ni mucho menos de sus naciones indígenas (a las cuales no hemos hecho 'desaparecer' como ellos a los indios de su tierra) sino que saben tratar con dignidad a esta aldea global que hoy es el mundo.
Yo recién vi ese capítulo el fin de semana pasada. Supongo que no querrán hacer un capítulo de algún irakí preso en Guantánamo torturado y vejado que no puede pasar 'hacia la luz' porque quiere darle una patada a todos los que en nombre de no sé qué andan matando...
Sorry por el hígado, pero hace mucho no me ofendía tanto una americanada como lo hizo ese capítulo.
Que fabulosos escritores sigan hablando y escribiendo lo que ellos quieran, son personas con un talento fabuloso, lo que no tolero es que ignorantes e inescrupulosos tipos hagan gala de una realidad que desconocen y que por encima de eso no respetan.
Si alguien sabe cómo hacer llegar un escrito a la televisora respectiva, con gusto remito mi genuino disgusto (en inglés, por supuesto, JAMÁS leerán en español) y a ver si por el susto de una inminente demanda paran la mano y no ofenden... ya entre nosotros nos choleamos suficiente, no necesitamos que nadie más lo haga.