5.2.07

Volver al laberinto

El Goya a la mejor película del año le fue otorgado a Volver, la cinta de Pedro Almodóvar. Otra manera de decirlo: el Goya a la mejor película del año le fue escamoteado a El laberinto del fauno, de Guillermo del Toro.

Durante las últimas dos semanas he visto ambas películas, y me pregunto qué consideraciones se puede tener para juzgar Volver --que es sin duda la obra menos interesante de Almodóvar desde, al menos, Kika (1993)-- como una cinta superior a El laberinto del fauno.

Guillermo del Toro
es un director mexicano entrado a discutir el tema de la guerra civil española, sus postrimerías y sus consecuencias. Su primer paso en ese terreno lo dio con Almodóvar como productor (la inolvidable El espinazo del diablo), y así lo recordó en la ceremonia del Goya.

Y, sin embargo, ante la disparatada desproporción de colocar a Volver por encima de El laberinto del fauno, uno no puede sino preguntarse qué rol juega el chauvinismo de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de España en esa decisión, que un tercero no implicado en el asunto puede fácilmente llamar desaire, sobre todo si uno considera que Alomodóvar también recibió el premio al mejor director, desplazando, también allí, a del Toro.

Yo por mi parte, sólo puedo decir que Volver, sin ser un desastre, parece, sí, la película de un Almodóvar aburrido y cansado de ser él mismo: cada giro es ritual, cada reflexión es anunciada, cada sorpresa es previsible y, por primera vez en mucho tiempo, su narración tiene caídas al vacío, personajes gratuitos y mal desarrollados, nudos dramáticos que se deshacen en el aire antes que resolverse o volverse interesantes.

Parece que Almodóvar se estuviera convirtiendo en el último recurso de la academia cinematográfica española para salvar cada temporada sin aceptar que algunos años la cosecha pueda ser pobre: da la impresión de que a la crítica hispana se le estuviera haciendo imposible distinguir entre las obras importantes de Almodóvar y sus salidas del paso, sus creaciones de fórmula.

Lo sorprendente es que este año sí tenían adónde mirar --al Laberinto--, pero decidieron ignorar la cinta de del Toro, confinándola a los premios técnicos y a un Goya al mejor guión original que sólo hizo más sorprendente aún la desconsideración del jurado ante el notable trabajo del director mexicano.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Tienes todita la razón.

Anónimo dijo...

yo no estoy de acuerdo, todo lo contrario, a mi me gusto muchismo volver, si por un momento se podria estar con miedo de ver algo al estilo mujeres al borde de un ataque de nervios o tacones lejanos o alguna parecida, con su insufrible carga de feminidad española y efervescencia secual reprimida que tanto caracteriza a la soc española reprimida por Franco, en este caso con engañoso enredo se arma una entertenida cinta que nos presenta a una penelope cruz buenisima y bien ricotona. Ahora el laberinto es otra cosa y se espera con ansias su estreno.

Anónimo dijo...

El tema de volver a ser quien uno supone que es, daba para bastante más, la idea del paralelo con fantasma que vuelve hacr fantasma le habría puesto bastante gasolina al asunto. Pero no despegó. Tal vez Almodóvar ya se olvidó de los años que se pasó calentando un asiento en Teléfonica.

En Wiki dice: "consiguió un empleo de auxiliar administrativo en la Telefónica donde estuvo 12 años" Por un momento pensé que podría haber sido cortando cables.

¿Penélope no le podría haber pedido prestadas un par de prótesis nasales a Nicole? Así al natural parece una empleada de limpieza, pero de la mansión PlayBoy.

Anónimo dijo...

me parece que cuando dices que "volver" tiene nudos dramaticos que se deshacen en el aire o saltos al vacio o personajes gratuitos m às bien , me parecen mas virtudes que defectos...¿por qué ese tipo de cosas son experimentales en la "literatura escrita" y "males" en el cine?...tampoco creo que volver sea la mejor obra de almodóvar y si bien no he visto el laberinto del fauno, no creo que "volver" sea defectuosa por las razones anteriores..
por otro lado, por lo que cuentas del laberinbto de fauno, puede parecerme muy buena (incluso puede gustarme màs que volver) pero siento un tonito de "obra de arte" compleja, exclusiva para una sensibilidad intelectual propia de este blog; sin embargo, ¿volver no es tan buena por ser menos compleja y más "descuidada"?
kimosabi

Anónimo dijo...

Para mí (apedréenme por decir esto si quieren) las películas se parecen a los cuentos, por lo tanto (cuelguen un perro en la puerta de mi casa) tienen que ser escuetos, no puede haber personajes prescindibles ni adornos que no contribuyan a dar (viajen en tiempo y vendan a mi tatarabuela a un tratante de blancas)el golpe final, eso creo que sale en el decálogo de Quiroga, que hace varios siglos (envíenme un telegrama cantado a la oficina) no releo. En cuanto al Laberinto del Fauno, ahí la tengo, pero primero quiero volver a ver Volver.

Gustavo Faverón Patriau dijo...

"Un tonito de obra de arte compleja, exclusiva para una sensibilidad intelectual propia de este blog".

¿Qué pasó? No entiendo a qué te refieres. ¿La referencia a Batman te pareció muy culta?

"El laberinto del fauno" es la película hispana más taquillera de la historia en salas norteamericanas: ¿que me guste te parece elitista? Ya pues.

Anónimo dijo...

¿quien hablo de elitismo? no seas paranoico

Anónimo dijo...

Por Alonso Izaguirre G.

El laberinto. se distrae en lo superficial y descuida a la historia. (Foto: Difusión)


4El laberinto del fauno, del mexicano Guillermo del Toro, postula a seis premios Oscar, entre ellos, a Mejor Cinta Extranjera.

El laberinto del fauno plantea una idea interesante: contextualizar un cuento de hadas en la España de 1944, con los rezagos de las guerrillas republicanas azuzando a una guarnición militar en la época de Franco.





HADAS Y OGROS. Lamentablemente, El laberinto. contiene situaciones previsibles debido al esquematismo de algunos personajes. Se salva el Fauno viejo. El esquematismo hace tambalear a un producto que sobrepasa al cuento de hadas. De otro lado, han echado mano de una partitura musical que subraya las situaciones de drama, fantasía o misterio, cuando las imágenes hablan por sí solas de ello.




Del Toro posee sobradas capacidades cinematográficas. Lo demuestra cuando Ofelia/Moanna le narra un cuento a su hermano aún no nacido: el espacio, el tiempo y el lugar de la narración cinematográfica son permutados con una elasticidad envidiable para crear una atmósfera acorde con lo sobrenatural.




No sostenemos que la película sea un desastre, pero el excesivo interés por los efectos especiales ha ido en detrimento del bello trasfondo de la historia. Así, El laberinto. es una construcción en donde los arquitectos han preferido embellecer lo más superficial de la edificación (los efectos y diseño de producción), antes que apuntalar las estructuras base (los personajes mal perfilados malogran la historia).




Las incursiones de Del Toro en Hollywood han estado marcadas por un sello personal que lo hicieron un cineasta de cierto interés. El laberinto. lleva anotadas seis nominaciones a los Oscar, ¿consecuencia directa de los más de 20 millones de dólares que la película recaudó en Estados Unidos?

http://www.peru21.com/P21Impreso/Html/2007-02-12/ImP2Cultura0669297.html

Gustavo Faverón Patriau dijo...

Si cada película que recauda más de 20 millones de dólares fuera nominada al Oscar, habría DECENAS de nominadas... Para poner un ejemplo práctico: solamente entre las 20 películas más vistas de ESTA SEMANA es Estados Unidos, hay DOCE que han tenido más de 20 millones de espectadores en el acumulado.