31.3.07

Una opinión y una carta

Sobre el tema de Alfredo Bryce, el diario La Tercera de Chile ha publicado en su suplemento cultural un artículo mío, que encontrarán si, entrando a la dirección del periódico sureño, bajan por la página hasta ver la primera plana del suplemento Cultura, hacen clic en ella y, en el pdf, buscan la página 8.

El diario Correo publica una carta dejada, a su paso por Lima, por el escritor Alonso Cueto, sobre quien en estos días un anónimo ha deslizado una acusación similar a las que pesan sobre Bryce, a raíz de un artículo del diario Expreso de hace diecisiete años. La carta de Alonso dice lo siguiente:

Solo a mi regreso de Cartagena y, estando en Lima por unas horas antes de partir otra vez de viaje, he podido ver la página que publicó el jueves 29 de marzo, con el título “¿Plagio o desliz?”. Con respecto a ello quisiera aclarar lo siguiente:

1. Al buscar en mis archivos he encontrado que efectivamente escribí ese artículo, que fue el último que publiqué en “Expreso”. Tengo el original en mis manos.

2. En el artículo original, hay una explícita referencia en el final de la primera columna. Allí menciono que la prensa argentina ha destacado algunas de las historias de la relación entre Borges y Kodama. Esta sección de mi artículo aparece sin embargo parcialmente mutilada, probablemente sin mala intención, en el facsímil que reproduce “Correo”.

3. Esta clara y explícita referencia a la fuente de la que obtengo el material muestra, a cualquier lector bien intencionado, que no hay ningún plagio ni intención del mismo en el texto.

4. Viéndolo en perspectiva estoy de acuerdo en que hubiera sido mejor entrecomillar algunas frases. Sin embargo, creo que todas aparecen después de la mención a la fuente anteriormente señalada, lo que exime el texto de una acusación de plagio.

En “salud del periodismo cultural” a la que usted se refiere al final del texto, espero que esta carta se publique en la misma sección en la que apareció el artículo aludido.

Atentamente,
Alonso Cueto

13 comentarios:

Anónimo dijo...

La Tercera

Bryce Echenique llama a Perú a "acabar con los brotes de patriotismo"
Fecha edición: 23/03/2007 03:36


El escritor peruano Alfredo Bryce Echenique se mostró orgulloso porque en abril próximo inaugurará con una conferencia magistral la cátedra del extinto escritor chileno Roberto Bolaño, en la Universidad Diego Portales.

El autor dijo que Perú y Chile deben recordar "la madurez" que reflejaron sus autoridades en 1979, cuando se cumplió un siglo del inicio de la llamada Guerra del Pacífico y superaron "la tentación de la guerra".

Al respecto, manifestó que los peruanos deben "acabar con esos brotes de patriotismo" y "seguir a Chile en su crecimiento económico y todo el dinero que invierte en educación".

Bryce Echenique hizo estas declaraciones al finalizar su última novela, Las obras infames de Pancho Marambio, un retrato del efecto siniestro de la traición en el ser humano.

Bryce Echenique, de 68 años, señaló que está "felicísimo y como un niño" por haber finalizado la novela durante su estancia semestral en Lima y confesó que, si bien su editorial no le había fijado un plazo, sintió "cierta angustia y cierta presión" porque, según dijo, siempre siente "miedo" y siempre está aprendiendo.

"Al escribir, siempre me siento un primerizo, porque no quiero perder esa espontaneidad que ha sido una característica de mi literatura", precisó el escritor.

Ganador del premio Planeta 2002 con la novela El huerto de mi amada, Bryce Echenique anunció que su nueva obra será presentada por la editorial Planeta en Barcelona, en otoño.

"El protagonista de la novela es Pancho Marambio, un falso arquitecto y buen amigo de un peruano que le encarga unos asuntos al instalarse en Barcelona y quien sufre de una enfermedad congénita de su familia, que él ha superado con una voluntad de hierro y con una vida exitosa: el alcoholismo", explicó.

Tras sufrir la traición de Pancho Marambio, la historia se vuelve cuesta abajo para el peruano, que acaba en un manicomio y ve pasar su vida de la luz a la noche, mientras se arrepiente de haber dejado Lima, indicó.

Para Bryce Echenique la felicidad por la conclusión de su obra se ha tornado gris en los últimos días, ante la acusación de plagio que le hizo el diplomático Oswaldo de Rivero, por un artículo que publicó el pasado 17 de febrero en el diario limeño El Comercio.

El escritor admitió que esa publicación fue "producto de un error" de su secretaria en Barcelona y confesó que ha "vivido días agridulces" por la supuesta confusión al entregar el artículo.

EFE

A. Ele dijo...

Gustavo:
Lamentablemente el link hacia el diario la tercera no ubica tu artículo. No sé si será del día de hoy o de ayer.
Attem
ALAN L.

Anónimo dijo...

La versión web de Correo no incluye la contundente respuesta de Correo a Alonso Cueto. Trataré de escanear la versión impresa.

Con ella, el tema queda zanjado, creo yo.

Alfonso Silva

Mariano Orosco Zumarán dijo...

El AMOR Y EL LABERINTO (ENTRE COMILLAS)

¿No les parece un poco traído de los pelos el intento de explicación de Cueto? Primero trató de salir del paso argumentando que ya había ingresado a El Comercio para la fecha que figura en el artículo supuestamente plagiado. Es más, aventuró que pudo haber sucedido un descuido por parte de los diagramadores, al colocar un texto que no le correspondía bajo su nombre, haciendo hincapié en que ya no acudió a las oficinas de Expreso desde una semana antes de su salida oficial, y recalcando que "No podía por lo tanto haber publicado nada en otro diario el 2 de octubre".

En la misma respuesta inicial a la acusación de plagio, Cueto añadió una suerte de contenida cantinflada al decir "Es posible, entonces, que [...] haya quedado mi nombre en algún cuadro o marco de los diagramadores y haya entrado allí el artículo que a lo mejor encargué a alguien pero que no escribí. Esto, si es cierto el documento".

Ahora, en la carta de descargo que dirige a Correo, nos sale con que la mención a la cobertura de la prensa argentina lo exime de culpa: "Esta clara y explícita referencia a la fuente de la que obtengo el material muestra, a cualquier lector bien intencionado, que no hay ningún plagio ni intención del mismo en el texto", señala el autor de "La batalla del pasado".

Pues, en mi humilde opinión, esto me suena a subterfugio, a una tinterillada de las peores, sobre todo cuando, al revisar detenidamente los textos en cuestión, nos topamos con párrafos "cuidadosamente copiados"; es decir, Cueto se ha dado el trabajo (al igual que el arrogante de Bryce) de modificar palabras puntuales del texto de "La Nación" y pretender hacer pasar como suyos pasajes enteros del artículo de Hugo Beccacece (pueden verificarlo cotejando al detalle los tres últimos párrafos de La Nación con los cuatro finales de Expreso).

Si alguien lee la versión de Cueto por primera vez (sin saber de la existencia de la fuente, claro), de hecho que va a asumir que todas y cada una de las palabras del texto, exceptuando, por supuesto, a las entrecomilladas —pertenecientes a las declaraciones de Kodama—, han salido del saber hacer y amplia experiencia del novelista peruano. Es evidente que nunca fue su intención señalar el origen de las declaraciones de Kodama, ni de la lograda semblanza que alcanza a transmitirnos Beccacece; si ese hubiera sido el caso, hubiera indicado claramente su fuente en el mismo texto o en una nota al final del artículo, ¿no lo creen así?

Por ello, pienso que lo que el llama "esta clara y explícita referencia" es una muestra más de su incapacidad de justificar lo injustificable. Lo que hizo Cueto es, simple y llanamente, un plagio. Una cosa es citar (algo que ahora, tras casi catorce años de la publicación de su nota, lamenta no haber hecho: "Viéndolo en perspectiva estoy de acuerdo en que hubiera sido mejor entrecomillar algunas frases", escribe hoy), y otra muy distinta copiar casi textualmente textos ajenos, meticulosamente retocados con la intención de hacerlos pasar como propios.

Como ya lo han manifestado otros internautas, el plagio implica una falta de respeto al lector y la convicción de que éste es tan ignorante o flojo como para no darse cuenta de la situación... algo que, volteando la tortilla, tranquilamente podríamos decir hoy de los mismos Cueto y Bryce. Así, este artículo de Cueto se encuentra ahora al lado del montón de textos "traspapelados" de Rafo León y el "descuidado" archivo de escritos de Bryce: tres ¿inescrupulosos? escribanos perdidos en medio de su propio laberinto de argumentos y nuestro amor por el buen periodismo.

Mariano Orosco Zumarán

Anónimo dijo...

jrkhasta con el periódico en el internet los chilenos nos sacan la mugre. leer la tercera de chile es verdaderamente placentero, nada que ver en comparación con los diarios peruanos, la república y perú 21 todavía se salvan (con mirada de peruano optimista, osea no están taaaaan malas), el decano el comercio, en cambio, da pena.

Anónimo dijo...

el colaborador de El Dominical de El Comercio, Mariano Orosco se equivoca. La única respuesta posible frente a una acusación de fraude no es la aceptación. También puede haber un error o la mala intención de terceros. Eso es lo que creo que ha pasado.

Mariano Orosco Zumarán dijo...

Estimado anónimo de las 3:55:

Me gustaría que me explicaras en qué me he equivocado. En mi comentario no digo ni doy a entender que la única respuesta posible frente a una acusación de fraude sea la aceptación, como señalas.

Lo único que he hecho es remitirme a las pruebas para plantear mis argumentos en el caso específico del texto de Cueto. Nada más. Y hasta donde llegan mis escasos conocimientos de Derecho —corrígeme si me equivoco, por favor—, eso es lo que debe hacer un buen abogado al intentar afirmar o refutar algo.

Hablando de eso, en tu comentario no encuentro ninguna prueba, ni siquiera un intento de refutación de tu parte. Te limitas a señalar algo evidente: que en toda acusación, ya sea de fraude, dolo o lo que fuera, la única respuesta no es la aceptación.

Lo que sí voy a aceptar, y con mucho gusto, es que me envíes cuando puedas una misiva en la que me detalles tus motivos para creer que en este feo asunto hubo o hay "un error o la mala intención de terceros". Te lo agradecería sobremanera.

Mariano Orosco Zumarán

P.D.: Por si acaso, hasta el momento no he leído la "contundente respuesta" a Cueto que señala Alfonso Silva. Sucede que Correo no es precisamente mi diario favorito. Estoy a la espera de que alguien se anime a escanear la página correspondiente o que el mismo diario coloque dicho texto en su versión electrónica.

Anónimo dijo...

No pareciera haber muchas dudas de que lo del artículo de Cueto ha sido un desliz sin importancia, nada que valga la pena recordar.

Anónimo dijo...

¿Se han dado cuenta de que blogers que viven de hacerle mimos a los grandes de la literatura peruana no han dicho esta boca es mía? ¿O será que se han quedado en el limbo? ¿O será que sí están hablando pero anónimamente y para meter candela?

Anónimo dijo...

no será que tienen otras cosas de qué hablar? De literatura puede ser, acusete?.

Anónimo dijo...

como es eso de que "una anónimo" ha acusado a Cueto. La acusación la hicieron Erausquin y Sotomayor. Ojalá que seas capaz de postear esto.

Anónimo dijo...

en salud del periodismo cultural por qué no discutes la actitud de Caretas frente a Bryce. Publicar un adelanto de novela de un plagiario es darle su respaldo, o no.

Anónimo dijo...

no creo que necesariamente sea un respaldo publicar a bryce. de repente el trato de publicación entre jaime bedoya y bryce es anterior al roche de los plagios. de todas maneras los plagios de bryce dañan su imagen como periodista, lo de la creación literaria es otra cosa.