17.7.10

Isabel Allende vs. Diamela Eltit

¿Premio Nacional a las Exportaciones?

En el 2001 la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas le otorgó el Oscar en la categoría de mejor película a Una mente brillante. Entre los candidatos que se quedaron en carrera estuvieron El señor de los anillos y Moulin Rouge, cintas acaso más mediocres que la triunfadora. Pero entre las películas de lengua inglesa que ni siquiera recibieron la nominación se encontraban Mullholand Dr, de David Lynch; Donnie Darko, de Richard Kelly; The Man Who Wasn´t There, de los hermanos Coen, y The Others, de Alejandro Amenábar.

O, para decirlo en otras palabras: a la hora de repartir premios, honores y distinciones, la gente suele hacer idioteces. Eso ocurre en el cine igual que ocurre en la literatura. Y no va a cambiar en el corto plazo ni en el mediano. Ni en el largo. Al contrario, es algo que va a ocurrir con más y más frecuencia, en la medida en que el dinero se vuelva cada vez más el descarado motivo y motor de las selecciones. En Chile se está dando un caso paradigmático y no poco patético.

La cosa es así. Al parecer, las dos candidatas favoritas a recibir este año el Premio Nacional de Literatura de Chile, que es una distinción estatal, son Isabel Allende y Diamela Eltit. La candidatura de la primera (que, para decirlo sinceramente, debería sonrojar a cualquiera que entienda que un premio nacional no es un reconocimiento comercial a las ventas sino uno cultural a la creación artística) ha crecido en volumen debido a una campaña montada por la editorial que maneja su obra, la transnacional Random House-Mondadori.

Los ejecutivos de la empresa se han encargado de reunir cientos de miles de adhesiones en Facebook y han reclutado el apoyo de tres ex-presidentes chilenos para promover la premiación de Allende. ¿Qué le puede interesar a Random-House Mondadori, desde el punto de vista comercial, que Allende reciba esa distinción, si los libros de la escritora son ya de por sí un constante éxito mundial desde hace décadas? La respuesta es obvia: lo único que Allende no tiene es el aura del reconocimiento artístico.

La candidatura de Eltit (también esto hay que decirlo) tiene toda la pinta de haber sido lanzado como la negación más radical posible a la de Allende: si algún escritor hay en lengua española hoy cuyo prestigio esté casi absolutamente limitado, al menos fuera de Chile, al ámbito académico, y cuya obra sea percibida como literatura hecha exclusivamente para intelectuales, ése escritor es Diamela Eltit, autora difícil de libros experimentales en los que la complejidad formal con frecuencia asume la apariencia de la abstracción o del hermetismo.

Poner una frente a otra a Eltit y Allende es poner en competencia una idea intelectual de la literatura como forma de experimento, aprendizaje y movilización de conciencias (Eltit) y una idea populista de la novela como forma de diversión, edulcorante de la vida cotidiana, enteramente ajena a cualquier ideal de trascendencia (Allende).

Mientras Random House-Mondadori quiere dotar a su autora estrella de una nubecilla de intelectualidad, quienes otorgan el Premio Nacional de Literatura de Chile están a punto de convertir esa distinción en algo muy diferente. Premiar a Allende por su éxito comercial, sin consideración alguna acerca de qué es lo que sus libros contienen (vástagos de un García Márquez leído con los anteojos de Corín Tellado), es transformar el Premio Nacional de Literatura en un galardón anual a las exportaciones. Es declarar desde el Estado que la literatura es pura mercancía y que su valor es simplemente monetario.
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12 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo, saludos!

sintrabajo dijo...

curioso, porque ese premio se instituyó para ayudar económicamente a los autores y que sigan produciendo su obra. de hecho incluye, creo todavía, una pensión vitalicia. entonces allende aparte de no merecerlo, no lo precisa. mejor se hace a un lado y deja el dinero a un autor que lo requiera,no?

Anónimo dijo...

en una entrevista en emol.com, la ex ministra alwyn decía que la Allende tiene mucho apoyo de mujeres, en especial de la academia. cuál es tu impresión? la mía es que entre algunos desavisados latinoamericanistas hay una hinchada bastante considerable para esta escritora (quien curiosamente nació en lima, perú)
saludos

Vanessa dijo...

Creí que estábamos inaugurando una nueva etapa, además del fin de una forma de hacer literatura, y supongo también de criticarla. Vamos que soy ingenua...

Cuántos libros de Diamela Eltit y de Isabel Allende leíste para lanzar tu lapidación concluyente sobre dos autoras. Un sólo argumento: lo intelectualizado v/s lo instrascendente y comercial? ¿?...
Cómo es que siempre tiñes tu discurso de una polarización extrema para lapidar a un autor y ensalzar a otro, no hay puntos intermedios en tu crítica, no pareces querer ir más allá de señalar tu preferencia personal sobre la postulación a un Premio Nacional de aquellas 2 escritoras chilenas.

En lo personal, la literatura intelectualizada de Eltit no me es
indiferente, por allí rondan sus títulos: "Lumpérica", "Vaca Sagrada", "Los trabajadores de la muerte", "Jamás el fuego nunca" y la "Colonizada" del 2009, entre otras que no he leído, a mi pesar, más que por fragmentos. (A lo mejor su postulación sirva para darle mayor difusión a su obra en su propio país...)

A Allende, ahora que estoy en su patria y veo la reacción de sus compatriotas frente a sus libros, créeme que con todo y mis prejuicios académicos (prejuicios que creo compartimos por deformación profesional) la estoy leyendo un poco más, o la estoy leyendo que ya es un comienzo.

En fin...

Ese anónimo, parece que lo conozco. A ver si opina algo alguna vez. Ufa!


Bueno, saludos.

Anónimo dijo...

Bueno la observación es tan obvia, que por lo menos tus criterios sobre la calidad de las obras de Isabel Allende compartes con C. Hildebrandt.

No recuerdo si fue 2007 ó 2008, pero en esa época habia programas alemanes tipo ¿La mejor canción de la historia? No fué sorpresa que ganara Scorpions con "Vientos de cambio" Cuando hicieron una encuesta televisiva similar sobre la obra literaria, pasaron una cuenta regresiva, entre los finalistas aparecian los archiconocidos: Thomas Mann, Schiller, y muchos que no me acuerdo pero sorprendentemente ganó "La casa de los espiritus" de Isabel Allende, curiosamente habia sido un boom literario cuando apareció a fines de los 80´s , curiosamente esta obra tambien tuvo gran impacto en EE.UU.

Juaneco

Anónimo dijo...

Resulta obvio que los lobbistas de Random House no pierden pisada y sencillamente quieren mas. Que ya vendio millones la Allende? Si, pero nada es suficiente. Que no merece el premio? Por supuesto que no, pero las corporaciones no se andan con miramientos: Allende es un producto que debe rendir beneficios.

Anónimo dijo...

ya le dieron el Neruda a Cisneros, pésimos síntomas.

Gustavo Faverón Patriau dijo...

Vanessa: no tengo idea de cuál es el sentido de tu comentario. ¿Qué motivos hay para valorar de otra forma la obra de Allende? Parece que apuntas a eso pero no dices nada. ¿Que la estás leyendo? Bien por ti. Yo ya leí libros de Allende y de Eltit, ampliamente, y en base a eso he dicho lo que he dicho. Si quieres decir otra cosa, adelante.

Anónimo dijo...

Yo leí a Allende porque un profesor me la recomendó hace años a. Los demás estudiantes quedaron prendados, yo volví a García Marquez y de ahi en adelante seguí +o- por ahi.
Allende nunca me convenció y cada que vez que me topaba con sus libros le sentía el tufillo oportunista,(el libro sobre la hija muerta es fatal, qué pretendía la señora?) En USA la adoran (vaya y se comprenda) pero darle el Premio Nacional de Literatura, es cosa de locos. Esta es mi humilde opinión de lectora, sin ningun prejuicio académico o algo por el estilo.


Si se habla de escritores chilenos en Estados Unidos, generalmente, mencionan a la Allende y a Neruda, si no hubiera reventado el chupo por Bolaño seguirían en las mismas.

Anónimo dijo...

Funciona con los insecticidas, con el aguardiente, con los pañales para adultos, con los juguetes para mascotas, ¿por qué los premios literarios deberían ser diferentes?

bardamu dijo...

Mi respeto y asombro ante la voluntad estoica de aquellos que pudieron seguir y leer ampliamente a Isabel Allende. A mi me bastó con un par de sus novelas para no intentarlo más.
Ahora si de reconocimientos literarios se trata, ahí tienen en Chile al maestro Nicaror Parra, Estando vivo un enorme poeta como Parra, la propuesta de Allende más que operativa editorial comercial (que lo es) parece una broma de mal gusto.
Saludos.

Anónimo dijo...

Por qué tiene que ser anual ese premio? Debería ser cada diez años o veinte años.

No es muy cliché decir que la Allende es la populista y la Eltit la artística.

Dada la superficialidad del cliché ninguna de las dos se merece el premio.