En The Master of Ballantrae, Robert Louis Stevenson convierte a su narrador, a la vez, en escritor de memorias y pirata. En mi ignorancia, no sé de otras referencias a individuos, ficticios o reales, que hayan ejercido los dos oficios.
Quiero decir, no hasta hoy: allí están los escritores, periodistas, profesores y estudiantes de literatura que, a punta de suplantaciones, infamias y graves amenazas, encubiertos bajo un anonimato que apenas llega a disimular precariamente su identidad, por muchos conocida, han sabido reunir en sus vidas el ejercicio de las malas letras con el de la peor moral y la ética de la piratería.
Ayer por la tarde, algunos de ellos hackearon el blog del proyecto Quipu y lo borraron íntegramente, por dos horas. Fue repuesto en la noche, porque todos los blogs que yo administro tienen back ups en otro servidor. Lo único bueno es que los hackeos mal hechos dejan huellas.
Fotomontaje. gfp.
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2 comentarios:
Es lamentable que un espacio que se está conviritiendo en una tribuna para todos, sea atacado de esa manera tan baja. No lo entiendo. Es triste saber que en todo estos años de historia dolorosa e insufrible lo único que muchos peruanos han aprendido, es, a desarrollar esta torpe cultura del autosabotaje.
Coincido con Galloso que es lamentable y mesquino sabotear un proyecto porque no es del agrado de alguien.
Entiendo, por el último párrafo del post de Gustavo, que sabe o tiene idea de quién fue el responsable de tamaña proeza. Tal vez no sería mala idea que le tirara dedo.
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