14.2.07

Flaco favor

Ese Daniel Salas es incorregiblemente elitista. Esta vez, el famoso cabecilla de la secta, amo del calabozo, mandrake de la mafia, corleone talibán y senséi del amiguismo ha ido demasiado lejos.

No le basta con vivir a cuerpo de varios reyes con el dinero de todos los americanos, o, al menos, el de todos los colorados del Midwest, gozando como puercoespín su beca doctoral en la universidad semiestatal de Boulder, allí donde van a esquiar Paris, Lindsay y Nicole.

Encima, se lo quiere restregar en la cara a todos los que no disfrutan el placer preternatural de unos años como candidato a doctor, con todo pagado, all inclusive: los libros en sus estantes, la casa dentro del campus, el seguro médico, los pasajes para congresos, los mejores profesores, etc.

Vive entre incunables, pasa por caja, se quema las pestañas tanto en el salón de los manuscritos como en la vereda del café mejicano al otro lado de Pearl Street.

¿Qué hace para merecerlo? Pequeñeces: una carrera admirable, unos ensayos juiciosos, unas clases transparentes, ser un estudiante de primera y un profesor igual, convertir cada conversación en un debate interesante, tener una opinión siempre y ganas de discutirla.

Es tan, pero tan elitista, vive tan encaramado en su torre de marfil, se complace tanto en tener las comodidades para estudiar de las cuales muchos otros carecen, que se da el trabajo de escribir, en el blog Gran Combo Club, un texto en el que aconseja, a todos los interesados en estudiar un postgrado de literatura en Estados Unicos, que lo hagan, que olviden sus prejuicios contra la academia americana y no se dejen llevar por la inercia que tantas veces conduce a jóvenes con interés intelectual a convertirse en adultos sin curiosidad por nada en la vida.

Si compartir la propia experiencia con los demás y recomendarla a los cuatro vientos no es ser un perfecto elitista, me pregunto yo, ¿entonces qué es?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Faverón:

Es bueno saber de tu existencia luego de muchas lunas...y también de Salas. Un abrazo.

Nuelma

Anónimo dijo...

así como Daniel Salas, hay otros intelectuales, como el poeta José Antonio Mazzotti, que hacen su trabajo intelectual con limpieza y honestidad, y eso no significa que se hayan "vendido al sistema" o quieran dar gato blanco por lobo rojo en los yunaites.

Anónimo dijo...

A Salas le faltó agregar algo así como "si crees que lo sabes todo, pero nadie se ha dado cuenta, también puedes quedare en el Perú, crearte un blog-basura y repartir insultos a diestra y siniestra"

No a los blog basura!!

Anónimo dijo...

No entiendo bien este post. ¿Es una ironía o es en serio lo que se dice de la vida en la "academia" estadounidense?