4.4.07

Otra vuelta

En una de sus columnas publciadas en Perú 21, el escritor Eloy Jáuregui consigna lo siguiente:
"Hace unos días, la Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española, como celebración del IV centenario del Quijote, presentaron en la Universidad Católica la Edición Extraordinaria de la obra de Cervantes, publicada por el Grupo Santillana bajo el sello Alfaguara. Es una edición de lujo de 1,360 páginas, con prólogo de Vargas Llosa, ideal para el bolsillo del común de los peruanos: 33 nuevos soles. Y uno se pregunta, por qué carajo los libros -con ley o sin ley- valen tan caro".
El artículo de Eloy Jáuregui tiene unas 1400 palabras. La mención al libro editado por la RAE y Santillana aparece pasadas las primeras quinientas, en la segunda parte del artículo, subtitulada "Que habla de los lectores". La primera parte, bajo el subtítulo "Que habla de los bultos", comienza así:

Que estando fresca todavía la tinta de impresión, hacia la primera mitad del año de 1605 viajaron, desde la península para América, cientos de ejemplares de la novela del Quijote. A bordo del galeón «Espíritu Santo» y, según cuenta Irving Leonard, doscientos sesenta y dos libros tenían como destino la ciudad de México. Dice también que en la nave «Nuestra Señora del Rosario» venía un encargo mayor. Eran sesenta bultos que un librero de Alcalá de Henares, un tal Juan de Sarriá, remitía a un socio que se había acuartelado en Lima. El valioso recado, que tenía como destino el puerto del Callao, llegó primero a Cartagena de Indias y, de allí, a lomo de mulas, pasó a Portobelo y luego a la ya traficada Panamá.

La historia oficial cuenta que de esta manera el Quijote comenzó sus aventuras por el Nuevo Mundo. Lo que no logró jamás Cervantes lo conseguía su criatura, dice”.

Lo curioso es el parecido entre ese párrafo inicial y este párrafo que forma parte del texto introductorio que la RAE antepone a la edición del libro:

"Conviene recordar que, fresca todavía la tinta de la impresión del Quijote, en la primera mitad de 1605 salieron para América cientos de ejemplares de la novela. Irving Leonard cuenta cómo doscientos sesenta y dos fueron, a bordo del Espíritu Santo, a México, y que un librero de Alcalá, Juan de Sarriá, remitió a un socio de Lima sesenta bultos de mercancía que viajaron en el Nuestra Señora del Rosario a Cartagena de Indias y de allí a Portobelo, Panamá y El Callao hasta llegar a su destino. Se perdieron en todo el trayecto varios bultos, pero así comenzó el Quijote su andadura americana. Lo que no había conseguido Cervantes, lo lograba su criatura asentándose en el Nuevo Mundo".
Posteriormente, Jáuregui publicó, en marzo del 2006, en su blog (ignoro si en alguna otra parte), un largo artículo de homenaje a Luis Jaime Cisneros, donde repite nuevamente el párrafo inicial de su columna de Perú 21, el que comienza con "Que estando fresca todavía la tinta de impresión...", y, además, se refiere a esa columna como una crónica escrita a raíz de la presentación del libro, es decir en el 2004. Curiosamente, esta vez el mismo párrafo aparece (bajo el subtítulo "Hidalgo, nueva versión") como si fuera el resumen de una conversación sostenida entre Luis Jaime y Jáuregui.

Sería interesante saber cuál fue la genealogía del dichoso parrafito, ¿no? Por supuesto, habrá quienes acusen a Jáuregui de plagio y desarrollen rápidas teorías sobre la ética del escritor y su conducta. A mí, en verdad, después de tantas vueltas que se le ha dado al tema del plagio en las últimas semanas, me interesa más señalar cuán delgada es la línea entre la copia y lo que los periodistas, en todos los medios escritos, llaman "voltear un texto".

A este texto de la RAE, Jáuregui parece haberle haberle dado la vuelta más veces que a la esquina de su casa, pero, aún así, en la operación, se le han quedado muchas frases ajenas. ¿Es una paráfrasis mal lograda? ¿Es una referencia que se quedó en el tintero? ¿Un artículo publicado y republicado en el cual el autor mismo, en algún momento, olvidó qué cosa era suyo y qué cosa era referencia ajena? Sí, puede ser cualquiera de esas cosas.

Jáuregui, por supuesto, es un periodista con décadas de experiencia. "Voltear un texto" es probablemente el primer trabajo que se les pide a todos los practicantes y redactores novatos en todas las redacciones del Perú. Yo sí creo que hay un punto en el cuál el texto deja de ser copiado y empieza a ser "volteado": si ese punto no existiera, se tendría que acusar de plagio a todos los artículos que provienen de una nota de prensa, por ejemplo, a todos los artículos que aparecen con la advertencia "Agencias" pero no mencionan el nombre de las agencias que originaron la noticia, y ciertamente (me lo recordaba un amigo hace unos días) a decenas de personas que escriben notas de "divulgación" y que no suelen consignar las fuentes.

La cosa se vuelve más difícil cuando el texto es suscrito por alguien a quien se ha buscado porque se le percibe como "una firma". La distancia entre un "volteador" y un columnista es la más larga concebible en el periodismo: es en la mayoría de los casos la distancia que va entre el noviciado y la experiencia. Lo malo es que, más allá de que "voltear" sea práctica común, y más allá de que no haya plagio en esa práctica, hay algo que huele mal en ella: es como si se pretendiera formar a todos los periodistas novatos en el arte de escribir versiones y variantes de textos ajenos y luego se esperara que la originalidad les llegase caída del cielo. Como vemos, a veces eso último no ocurre nunca.

PD: Un comentarista del blog nos hace llegar estos dos links. El primero es a un artículo de Eloy Jáuregui reproducido en su blog con fecha de noviembre del año 2006, y el segundo es un artículo publicado por el diario argentino Página/12 en julio del año 2006, cuatro meses antes, con la firma de Moira Soto. El artículo de Jáuregui copia literalmente párrafos del de Soto, y parafrasea otros párrafos, sin citar la fuente. Seguramente el próximo Caretas traerá un análisis del caso hecho por Jerónimo Pimentel, y, a no dudarlo, ya lo abordará próximamente el diario Correo, especializado en la materia. Digo, es un decir, porque a todo el mundo hay que medirlo con la misma vara, ¿no es cierto?

Imagen: Fotomontaje con imágenes de Cherwell.com y El Peruano.

24 comentarios:

Anónimo dijo...

Jáuregui no tendrá la suerte de Cueto. Como es amigo de los andinos y es otro de los que alucina y delira con las mafias, los blogs basura, dizque alternativos, no lo tocarán ni con el pétalo de una rosa, pese a lo escandaloso del asunto. Así de simple.

Anónimo dijo...

vamos, es una pésima volteada, pero qué más? Creo que el problemas más bien trae inquietudes profesinales. Qué le puede enseñar Jáuregui a sus alumnos de la UPC si trabaja así.

Anónimo dijo...

Gustavo:

Acabo de revisar algunos posts de Jáuregui y he comprobado algo que ya intuía desde hace tiempo: el pata escribe pésimo. Es de verdad penoso avanzar entre sus disforzadas oraciones y más que huachafas frases. No sé cómo le dan tribuna a un "periodista" como ese. Sus textos no son ni Literatura ni Periodismo, por más que él este firmemente convencido de que lo que hace es una mezcla de las dos cosas. ¡Cuánto extrañamos todos a Capote!

Un letrado

Anónimo dijo...

Gustavo:

Me puse a leer el blog de Jáuregui y encontré este párrafo suyo de un artículo del 20 de noviembre del 2006:

"Y aquí debo rendir homenaje a Terenci Moix quien llegó a decir que Loren “llevó el maggioretismo al extremo” –la mujer superior por revervado para la lujuria sólo para los que nos imaginamos cosas--, y agregaba que era una dama que supo reunir tres condiciones ideales para asegurar su estrellato por largo tiempo: “Ese físico fuera de serie, un talento cierto como actriz y el haber pescado tan tempranamente a un productor como Carlo Ponti".

Cosa extraña, en el diario argentino Página 12 del 7 de julio del 2006 aparece un artículo de Moira Soto con este párrafo:

"De la despampanante Sophia Loren, quien según Terenci Moix “llevó el maggioretismo al extremo”, dice Tirri que supo reunir tres condiciones ideales para asegurar su estrellato por largo tiempo: “Ese físico fuera de serie, un talento cierto como actriz y el haber pescado tan tempranamente a un productor como Carlo Ponti".

Si miras con cuidado verás que no sólo copia las mismas citas (pero dando sólo la referencia de la primera, no de la segunda) sino que además también copia lo que Soto escribe entre una cita y la otra:

"supo reunir tres condiciones ideales para asegurar su estrellato por largo tiempo".

En otro lugar de su artículo, Soto escribe:

"Salvo el caso de la genial Anna Magnani, que hizo una carrera paralela en el teatro (y que no entra para nada en la categoría de maggiorata)".

Jáuregui copia:

"como la genial Anna Magnani, que hizo una carrera paralela en el teatro –que no entra en la categoría de maggiorata".

En otro punto, Soto escribe:

"Ponti produce para Vittorio De Sica Dos mujeres, en 1961, y apuesta a que Sophia, de apenas 26, interprete a la madre de la adolescente en esta tragedia sobre la guerra, y funciona muy bien".

Jáuregui copia:

"Ponti produce para Vittorio De Sica “Dos mujeres”, en 1961, y apuesta a que Sophia, de apenas 26 añitos provincianos, interprete a la madre de la adolescente en esta tragedia sobre la guerra, y ella funciona muy bien".

Los que tengan dudas de que Jáuregui es un copión, pueden ver el artículo original de Página 12 del mes de julio del 2006 aquí:

http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/las12/13-2767-2006-07-11.html

Y pueden ver el artículo de Jáuregui en su blog aquí:

http://el-jauregui.blogspot.com/2006/11/grandes-coazos-2-abuela-hasta-que.html

No me he dado el trabajo de ver si el artículo contiene más párrafos "prestados" ni tampoco he revisado los otros artículos.

Anónimo dijo...

Gustavo: Que afán el tuyo de seguir intentando limpiar la honra de tu amigo Bryce. Gira la tuerca de una vez.

Anónimo dijo...

Parece que a los otros blogs no les interesa mucho la posibilidad de un plagio si el autor no es uno de sus odiados "criollos". Aquí se conoce la moral de la gente.

Anónimo dijo...

Muchas veces haciendo el esfuerzo de leer las columnas de Jáuregui, que una que otra vez escribe cosas interesantes, me he topado con deja-vus, esa sensación de haber leído ya antes eso. Creo que se si se investiga más, saldrán más cosas.
Me pregunto por otro lado si el abuso del copiado y pegado de algunos pocos bloggers no es en el fondo una forma de plagio también. Digamos que un "plagio blanco". Claro, no se roba nada porque se pone la referencia, pero se hace usufructo de la calidad del texto elegido sin dar nada a cambio. Hay blogs tan bizarros que llegan a tener hasta 80% de textos copiados y pegados.
¿Por qué mejor no ponen los links y se acabó?
Si el blogger no se tiene vena y voluntad para crear o pensar, pues simplemente que se haga a un lado. Así se evitará problemas y dejará limpia la cancha para bloggers con más ganas de ofrecer cosas nuevas a sus lectores. Saludos Gustavo, buen post.

Anónimo dijo...

Sería interesante que los bloggers que han seguido los casos recientes digan algo sobre este. ¿O es que solo es plagio si lo hace Echenique?

Anónimo dijo...

Habrá que esperar la cobertura de Marco Sifuentes, Roberto Bustamante, Carlos Gallardo, Alonso Alegría y todos los otros que han venido denunciando valientemente los casos anteriores. ¿Será que el caso de Jáuregui no sorprende a nadie?

Anónimo dijo...

Sobre el caso de Alonso Cueto tampoco han abierto la boca Carlos Gallardo, Alonso Alegría y una larga de lista de columnistas y bloggers. Es evidente que el caso de Bryce tuvo más cobertura y repercusión por la fama y notoriedad de este escritor.

A. Ele dijo...

¿Criollos, andinos? ¿Eso no había quedado superado ya?

Anónimo dijo...

Esto es el colmo. El 16 de julio del 2006, es decir una semanita después de que la periodista Moira Soto publicara su artículo en Página 12, Eloy Jáuregui ya se lo había plagiado y publicado en El Dominical de El Comercio.

En El Dominical, sin embargo, le recortaron el artículo y añadieron la fuente, para que no fuera plagio. Es decir, alguien le salvó las espaldas, pero se vieron forzados a poner el artículo, sin duda para no malograr el cierre. Y luego lo chotearon por copión.

Pueden verlo con sus propios ojos:

http://www.elcomercioperu.com.pe/edicionimpresa/html/2006%2D07%2D14/impdominical0540857.html

¿Cuál fue la reaación de Jáuregui? ¡Volvió a borar las referencias, volvió a tomar la versión que contenía el plagio y la publicó una vez más en una revista online!

http://xcrivas.com/modules.php?name=News&file=print&sid=298

¡¡¡Es decir, ha plagiado el mismo artículo TRES VECES!!!

Y con el mayor descaro, la tercera vez se quejó, vulgar y caradura, de que El Comercio le haya detectado el plagio y lo haya enmendado. Vean lo que escribe Jáuregui como "nota del autor" la tercera vez que repite el plagio:

"Nota del autor. Parte de esta Crónica fue publicada en El Dominical de El Comercio en julio de este año. Aquello produjo mi censura y expulsión de ese diario y se ordenó que jamás se vuelva a publicar mi nombre en sus páginas. Asunto del que no me felicito pero que denuncio porque sus lectores no tienen la culpa sino algunos editores de taco bajo que se cagan de envidia con lo que escribo y cómo escribo. Para vivir de pie y no de rodillas, es obligatorio no ser un mediocre. Ustedes se la perdieron".

No hay que ser brujo para darse cuenta de que a Jáuregui lo votaron de la plana de colaboradores de El Comercio por plagiario, pero el hombre se pone en plan de rebelde y víctima. Qué descaro.

Y los blogs que tanto se han rasgado las vestiduras con el caso de Bryce ahora chitón nomás, no dicen esta boca es mía. Qué tal descrédito, esto deja en claro quién es quién.

Mariano Orosco Zumarán dijo...

Amigos:

Me recalco en lo manifestado —hace unos días en otro blog muy visitado— acerca de la mediocridad reinante en nuestro medio periodístico y cultural. Las revelaciones de las últimas semanas en torno a evidentes plagios de Bryce, Cueto y Jáuregui (y no olvidemos al "traspapelado" Rafo León) son una prueba más que fehaciente de ello.

Pero, por favor, apliquemos el mismo rigor a la hora de criticar las faltas a la ética de nuestros escribas. Hablemos claro tanto de aquellos pertenecientes a la supuesta argolla enquistada en los principales medios de prensa como de los salidos de las filas "contestatarias", "iconoclastas" o simplemente "independientes" (con toda la carga de ironía que puedan tener hoy en día estos adjetivos).

Mariano Orosco Zumarán

Anónimo dijo...

sin duda estamos en época de vacas flacas en cuanto a moral entre los escritores. Pero los blogger tampoco se salvan. Sino miren la recomendación que hacen en "La Fortaleza de La Soledad"------

"Esta primera versión de "La piscina" es más que recomendable. Así que coge tu revista de cable y separa día y hora para que la veas, y si no tienes cable, pues el pirateo -por emplear una palabra que no sea chocante- es el ingenio por excelencia en perulandia, siempre y cuando un acto de nobleza como el ver una buena película lo justifique".

O sea que si la película es buena, compra pirata nomás, que tienes la bendición de la blogósfera. Ya pues, Gustavo------------

Anónimo dijo...

Conviene tener en cuenta que una de las estrategias favoritas de la fujimorización es decir todos somos culpables pues así no hay culpables.

Anónimo dijo...

Pues yo diría "esta boca es mía", pero recién me entero que existe alguien llamado Eloy Jáuregui.

Anónimo dijo...

Quéeeeeeeeeee!! en serio jauregui dijo: algunos editores de taco bajo que se cagan de envidia con lo que escribo y cómo escribo???

recontra juats! ¿en qué momento se jodió el periodismo en el Perú?

Anónimo dijo...

de El Hablador:

"Acabo de ver en el blog de Marco Sifuentes que ustedes son considerados el blog del momento y quiero felicitarlos por eso a pesar de que hemos tenido discrepancias.
El blog de Sifuentes cumple un papel destacado en cuanto a investigación y denuncias, como hemos visto en los últimos meses. Si el popular OCRAM dice que ustedes son un blog bueno, deben serlo. Muchos saludos y seguimos con las polémicas constructivas".

Anónimo dijo...

Te prendes con Pimentel porque el no le soba las botas a Thays como tu!!!!

Anónimo dijo...

comentarios intrascendentes como los del anonimo de las 6:25PM son los que reflejan estupidez mental, envidia chismografica y extrema incapacidad de razonamiento critico. porque los publican?
y a proposito de thays, alguien puede explicar porq no activa su blog?
slds.
bn

Anónimo dijo...

ese editor al que se refiere jáuregui, si mis cálculos no andan mal, es alonso cueto. es una acusación muy seria que jáuregui debería ser capaz de probar "por el bien del periodismo cultural". y si no puede, pues que se calle la boca, no?

Gustavo Faverón Patriau dijo...

Tus cálculos andan mal: Alonso renunció a El Comercio mucho tiempo antes. El Dominical tuvo editores interinos por varios meses, incluyendo, me parece, la época en que esto ocurrió.

Anónimo dijo...

Asi, eso, con ese rigor deberias actuar en otros casos, digo es un decir, Gustavo, no seas conchudo. A todo el mundo hay que medirlo con la misma vara, ¿no es cierto?

Anónimo dijo...

En su último libro Del pensar mestizo Hugo Neira sostiene... Perdón. Un paréntesis. Yo no tengo secretaria como Alfredo Bryce. Pero quisiera. Yo he callado respecto a su problema. Tengo mis razones. Quiero mucho a Alfredo. Guardo duelo, se entiende. Don Luis Jaime Cisneros ha dicho que hay un problema con el alcohol. Qué lástima. Se apura el maestro.

A falta de secretaria tengo varios blogs. Un harén digital. ¿Blog? Sí, mis diarios en Internet. Son mis gimnasios escribales. Los sitios para mi calistenia literaria. Mi cajón de sastre. Mi carpintería –Gabo dixit–. Coloco textos míos y de gente que admiro. No frieguen, son míos. Hay otros. Contienen belleza y a veces basura. Uno de ellos, el que perpetra el señor Gustavo Faverón, dice que en mis blogs hay plagio y "volteos". ¡Qué honor, Alfredo! Ya somos tres. En el colmo confirma que mi arte consiste en plagiarme a mí mismo. ¡Qué locura!

¿Por qué me muerde? Explico. En mi columna "Sangre en el ojo" del 26 de enero del 2007, en este mismo lugar, sostuve que en el libro Toda la sangre, Antología de cuentos peruanos sobre la violencia política, el señor Faverón era un agente solapa al acusar de senderistas a creadores como Miguel Gutiérrez, Zen Zorrilla, entre otros. Todos escritores lorchos como explica Goyo Martínez. ¿Curioso, no? No es un asunto literario. Es dedo puro. Me reafirmo.

Los "críticos" y algunos bloggers viven de nosotros: los creadores. Si no se mueren de hambre. Yo escribo ficción y no ficción. Mi novela Aunque me cueste la vida hace su colita en una editorial. Yo escribo poesía y periodismo. Yo soy de Hora Zero y no creo en lorchos o pitucos. Hay buenos y malos escritores como existe la lucha de clases. Soy de izquierda y no envidio. Tengo casa en la playa y almuerzo en Pescados capitales con la mía. Trabajo creando las 24 horas, por eso no soy "crítico". No tengo tiempo.

Decía que leí a los gritos y con mi mujer el libro de Hugo Neira. He ahí el retrato de un intelectual adolescente de base 6. Venía diciendo que Neira es nuestro mejor ensayista –maneja con brillantez la literatura de las ideas– pero me ladraron. ¡Qué desagradable! Lo dejo para la próxima.