6.8.09

Status quo

Asesinato de la novela por el novelista

En la mayor parte de las industrias de este mundo, sobre todo en las que no quieren satisfacer necesidades primarias, los negociantes no buscan ofrecer los productos más tradicionalmente aceptados, sino los más novedosos y originales.

En la industria editorial, crecientemente, se intenta no arriesgar y no romper (no rajar, no astillar, no tocar ni con el pétalo de una rosa) la estricta monotonía de lo ya conocido.

La mayor parte de lo raro, lo inesperado, lo complejo, lo distinto y lo exigente se margina, se guillotina y se deja de lado, por inseguro, porque las cifras son demasiado grandes para apostar sin que se pueda prever el éxito.

Tras esa amputación, una vez cercenado todo lo arriesgado, la industria editorial bautiza como polémicos, escandalosos, osados o sorprendentes a textos que son convencionales y previsibles: se reemplaza al escritor temerario por el equilibrista con red y cinturón de seguridad, y se glorifica a este último como si fuera un pionero de verdad.

Todo está tan estandarizado que en los últimos años basta con que un autor escriba novelas muy cortas o novelas muy largas o novelas con personajes sin nombre propio o novelas con párrafos cortitos o larguísimos para que la editorial lo publicite como un terremoto de hipervanguardia.

El margen que las editoriales se reservan para proponer libros realmente originales es cada vez más estrecho y es menguante: si hoy, en el ámbito hispano, queda todavía espacio para un libro de Piglia o un libro de Ponte o la gran novela póstuma de Bolaño, ese terreno podrá dejar de existir dentro de poco.

Y de tanto escribir novelas que nacen anquilosadas, endurecidas, prefabricadas, igualitititas, novelas para el aeropuerto, el resort y el salón de belleza, los novelistas podrán matar a la novela; de hecho, ya están propiciando su posible decadencia. No se dan cuenta de que la inmovilidad de las fórmulas es el rigor mortis del arte.

46 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero por qué no das ejemplos Gustavo. No serán Cueto, Rocagliolo y Thays esos escritores que escriben para vender, y que han desnaturalizado la literatura, su propia literatura con tal de aparecer en editoriales españolas, ganar premios en España con obras no digamos mediocres, pero si algo infladas por los medios.

Anónimo dijo...

nombres propios, pleeeasee

Anónimo dijo...

Concuerdo con todo lo que has dicho. Lastimosamente, lo aquí planteado se cae porque este blog ha demsotrado admiración por Bolaño sin s, que pareciera ser la última gran impostura editorial.

Aquí, alguien que lo dice muy clarito:

http://mistercolombias.blogspot.com/2009/06/bolano-la-farsa-del-siglo.html

Saludos.

Anónimo dijo...

¿No fue acaso Juan Goytisolo el que dijo que ya no podía leer una novela que diga 'contestó, murmuró, encendió un cigarrillo'?

Anónimo dijo...

Nombres, mijo

Anónimo dijo...

pregunta secundaria:

¿No es "statu quo" en lugar de "status quo"?, ya había leído antes en este blog la segunda forma y ahora me animo a compartir la duda (no tengo idea).

Saludos,

Isaac Cazorla

Anónimo dijo...

Faverón, en buena parte tienes razón. ¿Seguramente tu novela El anticuario es original, auténtica, y trascendente?

Pedro.

Anónimo dijo...

y no te olvides de Ampuero, estrella de Planeta Perú y perpetrador de novelitas bien hechecitas y que no cambian nada.

depeupleur dijo...

Pero se edita a Levrero y a Eltit y si bien no son grandes éxitos -malo sería que lo fueran- por ahí se los encuentra uno en las librerías.

Guillermo Barquero dijo...

Se entiende perfectamente de lo que el artículo habla, pero la ejemplificación es lo mejor en estos casos, y no hablo particularmente de autores peruanos, cuyas obras realmente no conozco. Quizá se podría citar a casos como Bolaño, Aira y Bellatin, dependiendo de los gustos y de lo que se busque; ¿de cuáles escritores hablabas?

Gustavo Faverón Patriau dijo...

Podemos hacerlo al revés: pensemos en qué escritores contemporáneos del mundo hispano podríamos calificar como experimentadores formales, como autores que arriesgan en la forma más allá de las expectativas creaadas en el público más o menos "masivo". Si pueden comenzar a lanzar nombres, podemos tener una discusión interesante. Yo mencioné a Ponte y a Piglia, por ejemplo.

Gustavo Faverón Patriau dijo...

A eso quiero añadir otro comentario: si empezamos a listar a los que no nos particularmente experimentales, vamos a llegar a una lista interminable y, además, vamos a darle forma de acusación a algo que no lo es. Porque, aunque parezca contradictorio, es en extremo difícil "acusar" de conservadurismo formal a un escritor, porque todos los autores, uno por uno, tienen derecho al conservadurismo, a inscribirse en una tradición sin alterarla crucialmente. El problema es cuando esa tendencia se vuelve casi exclusiva.

Anónimo dijo...

experimental, el único en el Perú, César Gutiérrez.

Paz, Fuerza y Alegría - Primaria dijo...

Y como consecuencia la última Feria Internacional del Libro en Lima.

LuchinG dijo...

¿Entonces quièn està volviendo esa tendencia en exclusiva? Sì, ya sè: las editoriales, los mercaderes, los lectores; pero si el escritor no tiene parte de la culpa (porque "tienen derecho al conservadurismo") entonces no puedes decir que esto es el "asesinato de la novela por el novelista".

Tal vez su parte de la culpa no sea literaria, sino marketera. Al participar en la maquinaria del marketing, al frivolizar la literatura, al ceder a la tentaciòn de usar cualquier medio para conseguir lectores, al permitir que lo publiciten como un innovador, impide que los verdaderos innovadores lleguen a las imprentas. En ese caso, si los señalas como conservadores sobreestimados y marketeros, no les estarìas negando su derecho a ser conservadores, sino a estar siendo sobreestimados y sobre-expuestos.

Luis Salvador dijo...

Gustavo, en primer lugar, qué quieres decir con novelas muy cortas y novelas muy largas? Debería de haber termino medio? Además, si dices que la muerte del arte se debe por la predominancia del status quo, què decir de los talleres literarios? Si estos son: creadores de reglas y metrajes de cómo tendría que escribirse una buena novela y un buen cuento,según el criterio de los que las imparten. En Argentina los talleres abundan, en Perú el caso se esta poniendo más fuerte y en EEUU ni hablar. Estos no crees que son hervideros de escritores predecibles y de mala literatura.
Un caso peruano, que en mi opinión es el más aplicable aquí por su notoriedad es Daniel Alarcón. En su primer libro de cuentos, para el nivel de Perú, es más que bueno por haber sido su primera publicación, pero su novela Radio ciudad pérdida y su último libro El rey está por encima del pueblo, dejan mucho que desear en comparación del nivel mostrado en su primer libro, y él es un escritor salido, segun sé, de una de las "mejores escuelas creativas de los EEUU" y seleccionado por Granta.
En segundo lugar, otro caso César Gutierrez, autor de Bombardero. Cualquier lector con un poco de amor a la literatura, la buena literatura, discierne que es totalmente risible cuando se califica a su libro como el "gran libro de vanguardia peruana de comenzado el siglo" por críticos de renombre, al menos en Perú, que salen en los medios y enseñan en universidades. Pongo estos dos casos porque, a mi parecer, ilustran mejor el panorama de la literatura peruana actual, ya que si estos escritores se ponen como ejemplo de siquiera "buena literatura hecha en nuestros días", qué se puede esperar al menos en corto plazo por aquí. Comprendo que un escritor (el de raza, y no lo digo peyorativamente) es en si aquél que en alguna (o en gran)medida tiene la necesidad de escribir para si universos, mundos complejos pues así como entiende la realidad o se desentiende de ella, ya que de esta manera puede vivir en paz, esto no es algo que se vea por aquí: un escritor con un proyecto de largo aliento, pero con un proyecto, precededido de un largo primer plano, como le dijó Emerson a Whitman. La mayoría ya va por su 3er, 5to libro y nada, no pasa nada.

Anónimo dijo...

SEAMOS CLAROS, FAVERON NO HA PODIDO INTRODUCIR SU LIBRO EN ALGUNA EDITORIAL, LUEGO, CRITICA A LAS EDITORIALES DE TEMEROSAS Y CONSERVADORAS, TRAS AÑOS DE ALABAR A ESCRITORES QUE HACEN DE LAS SUYAS EN ESTE PESIMO MERCADO EDITORIAL (Alguien por ahi ya los mencionó)

Anónimo dijo...

Me gustaría dar la siguiente opinión. Existen escritores que escriben novelas siguiendo el modelo clásico del siglo XIX, y escriben novelas en serie, uno más interesante que otra, pero que no aportan nada el desarrollo del género. Este tipo de escritores les encanta a la editoriales, porque son autores fáciles de leer y venden.
El segundo tipo de escritor es el vanguardista que sigue el modelo de Joyce. Pero este tipo de experimentalismos ya no interesa a nadie. El caso peruano más patético es el Bombardero, que es pura experimentación vacía y un fracaso editorial.
El tercer grupo es que el que verdaderamente renueva el género. Pero su originalidad impide que los critícos, las editoriales e incluso el grueso de los lectores puedan percibirlo. Son los escritores valiosos a descubrir que si se es lo suficientemente lúcido y se deja el canón a un costado y la influencia en la opinión de los medios tal vez se consiga detectarlo a estos renovadores invisibles.

Sr. H.M. dijo...

Pero Gustavo, ¿no crees que siempre hay una tendencia general y, al margen, los disidentes? Y ya no solo dentro de la novela sino que también se podría extender a otros terrenos. Lo que va a vender es lo fácil, lo plastificado, reluciente y con mejor gancho. Lo que quiero decir es que no creo que antes hubiera sido mejor. Además, la originalidad no siempre comporta calidad, ¿no? En cualquier caso, yo también deso una revolución, una oleada de coraje editorial que se me antoja un tanto improbable.

Anónimo dijo...

No entiendo como asterion puede recomendar un articulo tan torpe y decir que dice todo "muy clarito".¿de cuando aca los insultos son argumentos? Creo que es normal que un escritor talentoso como bolaño despierte cierta envidia y hasta pueda resultar exasperante pero lo realmente patetico es que sus opositores o quienes se sientan limitados por lo significo (y todavia significa) su literatura decidan seguir e incluso aplaudir insultos y arbitrariedades.Asi como las empresas cierran sus puertas a la creatividad y reducen la pluralidad de opciones,tambien existen quienes recurren a formulas tan comunes y efectistas como la de los best seller:los insultos y la descalificacion gratutita.Ambos al final terminan causando el mismo daño.
mario

Anónimo dijo...

Bombardero...
Carlos Gallardo con su espuma!
Aguirre con su Conde de San Germán

sigan, sigan...

Anónimo dijo...

Lo cierto es que el subtítulo suena a acusación "Asesinato de la novela por el novelista". Los novelistas como culpables de la supuesta muerte de la novela

Si afirmas que el escritor es titular de tal derecho (conservadurismo), el problema al fin y al cabo encuentra su raíz en el afán lucrativo de las editoriales porque, por lo menos hoy en día, son ellas las que definen las tendencias, ¿o no?

AL

Anónimo dijo...

Y Aira?
Y Bizzio? Lean Rabia, o el cuento Cinismo.

Saludos
r

Anónimo dijo...

Gustavo, sería más interesante (con respecto a tu 2do comentario) que señalemos a quines se ciñen a las fórmulas y a quienes no. Creo que sería bueno leer las opiniones de todos, respecto a los arriesgados y a los no.

Anónimo dijo...

"pensemos en qué escritores contemporáneos del mundo hispano podríamos calificar como experimentadores formales, como autores que arriesgan en la forma más allá de las expectativas creaadas en el público más o menos "masivo""

Roberto Bolaño, pero lejos, es el que toma la posta de una nueva literatura. Creo que es el quien mas arriesga en la forma, y termina ganando... pena que este muerto.

Anónimo dijo...

El problema es la sobre-oferta de novelas en el mercado. Hay un exceso de buenas novelas. Novelas dentro de un mundo globalizado junto a novelas peruanas. ¿A qué nivel de discusión nos estamos moviendo, las novelas peruanas o las novelas producidas en el mundo y leídas por todo el mundo en el mundo entero? La de una novela mundializada es la de un mercado del libro mundializado? La sobre oferta mundial es muy grande y está manejada por las campañas mediáticas de las grandes editoriales. La oferta peruana aunque escasa es, también para un publico lector escaso, una sobre oferta. En ambos niveles hay falta de buena crítica que guie a los lectores en una selva de libros en la que se confunden los buenos libros con los inflados por las campañas mediáticas que las editoriales extranjeras y peruanas montan para vender. Entonces delitimos nuestro marco de discusión. No se puede mezclar Bolaño con Carlos Gallardo, por favor. El Perú y el mundo se han mezclado cuando se trata de leer. El lector busca, como se vio en la Fería, autores internacionales inflados por los premios, por los agentes literarios que compran periodistas y por los operadores internacionales del libro como son los blogs. EL blog Moleskine de Thays nos ahoga con una sobre oferta, que son tantas novelas sobre los que informa que ya no se sabe qué leer, que es bueno y qué es malo. Las editoriales alternativas peruanas apostaron en la Feria por libros de autores nacionales y tuvieron bastantes compadrores, superando cifras de ventas de años anterior. Tanto que fueron autores peruanos los más vendidos en la Feria. Hay una oferta también en el Perú y para todos los gustos, pero siempre es una sobre oferta para una cantidad de lectores limitada. Pero creo que no hay que mezclar las cosas. Una cosa son los autores del mundo y otra la de los lectores peruanos.

Mario Salazar dijo...

Falta la técnica, falta la imaginación, falta el talento, falta la creatividad, falta el riesgo, faltan las vivencias, falta el conocimiento y la cultura, falta la inteligencia y con todo ello surge la falta de escritores buenos de verdad.

Las Editoriales no arriesgan porque no ven todo ello junto sino minucias y le temen a las ventas, la ambición y no el amor a la práctica los mueve, además el público está acostumbrado por la rutina a leer libros simples y efímeros, solo quieren una historia llamativa ni siquiera escrita con grave inteligencia, quieren solamente emociones superficiales, un poco de fast food mientras apuran el paso al trabajo.

El hombre es un animal de costumbres, lo que le das repetidas veces se hace un vicio, un deseo, ya no quieren otra cosa, le teme a lo distinto, le huye a lo bueno y complejo, a lo profundo, al universo literario del escritor con múltiples habilidades.

Se subestima la capacidad del público y no se quiere trabajar a largo plazo. Y sobretodo no se respeta la verdad y la honestidad. Se devalua el arte. Saludos.

Mario.

Anónimo dijo...

Tienes razón, Gustavo, bombarderon es un bluff. Lo peor es que hasta tu pata Ampuero habla maravillas de él y encima últimamente ha sido halagado hasta la exasperación por Julio Ortega y Gustavo Gorriti... deberíamos hacer algo para revertir esa tendencia.

Anónimo dijo...

-¡¡¡ que muera el terremoto hipervanguardista genenerado por el antipático de césar gutiérrez!!!
-¡¡¡que muera!!!!

Anónimo dijo...

Ese comentario ultimo del anonimo es insolito, veamos:

A)
"El problema es la sobre-oferta de novelas en el mercado. Hay un exceso de buenas novelas."

De aqui a cuando el exceso de buenas novelas es un problema. Creo que es al contrario; el exceso de buenas novelas es una solucion.., una excelente noticia para todos: lectores, autores, criticos, editores, etc.

B)
Mezcla#1: "No se puede mezclar Bolaño con Carlos Gallardo, por favor."
Mezcla#2: "El Perú y el mundo se han mezclado cuando se trata de leer."
Mezcla#3: "Pero creo que no hay que mezclar las cosas. Una cosa son los autores del mundo y otra la de los lectores peruanos."

Pregunto, ¿que tanta obsesion por la mezcla? La literatura no es necesariamente un laboratorio de bio-quimica. En todo caso a mi me parece que es bueno mezclar, no solo eso; creo que en arte mientras mas mezclemos, mas posibilidades y mas expresiones originales apareceran.

y C)
"EL blog Moleskine de Thays nos ahoga con una sobre oferta, que son tantas novelas sobre los que informa que ya no se sabe qué leer, que es bueno y qué es malo"

Que raro, yo le debo al blog Moleskine una buena cantidad de autores y obras que desconocia. Me parece que el blog es un logro meritorio, simple y original. Para mi, ademas es un referente indispensable sobre lo nuevo descubierto y proximo a leer. El blog se ocupa no solo de la "movida" literaria internacional, sino tambien de la local. ¿Que mas podria esperar? Como aficionado a la literatura me siento afortunado, ademas es gratis...

Slds.
R

tiembla vaporito dijo...

Hay que ser bien rosquete para escribir lo que escribes y no dar el nombre específico de la unánimemente considerada, una y otra vez, como la Gran Novela Peruan de Vanguardia. Di su nombre, espétale en la cara lo consuetudinario, corriente e intrascendente que es. Todo esto si eres hombre, por supuesto. Y a ver si no te tiemblan las piernas, como debes estar cuando leas esto.

Anónimo dijo...

Gustavo, Cesar Gutierrez te insulta feo, te llama callejonero

http://www.limagris.com/cesar-gutierrez.html

Anónimo dijo...

No debe tomarse las ventas feriales como referente, el libro más vendido fue el de Aldo Miyashiro y el de la feria del año pasado el de Renato Cisneros, así que ya sabemos en qué nivel estamos cuando se trata de marketing editorial. El próximo año el más vendido será Carlos Alcántara, probablemente.
No todo el problema, pero sí gran parte, son los talleres, como ha sido indicado aquí por un comentarista. El taller literario se basa en que para cualquier arte es válido un método. Pero, lamentablemente, esto sugiere una rutina acartonada de cómo debe ser tratado tal tema y cómo no, dependiendo de la visión particular del ponente. Con esto quiero decir que, por ejemplo en el taller de Cueto y Thays en la Católica saldrá solamente una generación de escritores fríos, tradicionales, acostumbrados a la aprobación de textos que cumplan con los estándares asimilados en esas sesiones, como se puede comprobar fácilmente ya que algunos han publicado ya en pequeño. Es cierto que hay jóvenes no talleristas que van por la misma tendencia, pero la mayoría opta por una separación estilística notable. Lamentablemente, la calidad de algunos de estos últimos (sin mencionar nombres) dista de ser suficiente para ser promocionada en forma debida, arrastrando consigo al resto de autores noveles.

- Japhet

Anónimo dijo...

a propo, ya leíste las acusaciones paranoicas y sin fundamento de Bombardero a Editorial NORMA, son gravísimas, me pregunto si tendrá pruebas o será resultado de una resaca monumental.

Rubén

Anónimo dijo...

El problema de la sobreoferta de libros se produce cuando la demanda es escasa, hablando en terminos de mercado. Es decir cuando hay demasiados libros en el mercado para un público reducido de lectores. En el Perú ha aumentado enormemente la oferta, pero no ha aumentado el número de lectores.
En cuanto al Moleskine de Thays, este es una especie de gran escaparate de libros a leer sazonado con anecdotas del mundillo literario internacional. Esa es su catacterítica, es un blog que elogia libros, libros editados por editoriales extrajeras. Parece no interesarle los libros peruanos, pero ese es también su derecho. Por lo general reproduce cosas que se han dicho otra parte. Pero conociendo la versatividad del señor Thays sería interesante que nos dijese, de ese mundo de libros de los tantos que hay circulando por el mundo, qué libros no hay que leer en medio de este aluvion editorial, y cuáles sí. Cuáles son inflados por editoriales y agentes y cuales son los libros de lectura obligada. Es decir Moleskine debería ayudarnos a separar la paja del trigo. Tiene razón hay mucha paja y poco trigo.

Anónimo dijo...

qué irresposable eres, Gustavo, promocionas en tu blog a un adefesio como el blog de Ybarra donde se mancha la honra de una editorial seria que ha publicado a escritores peruanos sin problemas, solo porque uno de sus escritores se pasó de copas y de boca en La República. No es justo.

Guillermo Barquero dijo...

Se me vienen a la cabeza los nombres de Bellatin y Aira. Bellatin me parece un caso raro: trabajos con una perfección formal y trabajo de poda totalmente efectivo y (me imagino yo, lo parece) obsesivo. Sus temas son medio tontos, y de eso salvo a "Salón de belleza", pero con todo y sus defectos, me parece digno de mencionar. Parece no romper con nada, pero creo que despedaza mucho de lo hecho.
Aira es un caso de grafomanía (¿será esa la palabra?) sin nada qué decir, pero con un pico artístico tan particular como "Ema, la cautiva". Aira es sumamente publicitado, de él se habla mucho, se lo lee bastante, pero me parece mediocre.
Mencionaste a Piglia; comparalo con Aira, y César desaparece, no queda más que las toneladas de papel que se han gastado en imprimirle su montón de libros.
Aunque no venga al caso, menciono mi lectura actual: Pynchon. ¿Hay algo así en Latinoamérica, una mezcla de ambición, escritura desmedida, chapucería, grandeza, totalización, ridículo, omnipotencia? Para pensar (que no se diga el nombre de Bolaño).

Anónimo dijo...

No entiendo nada. El escritor, lo único que tiene que hacer es escribir, exigirse asímismo. Leer como un loco y escribir y ser consecuente con las decisiones que tomó y no reclamarle a nadie nada, no perder el tiempo en este tipo de cosas de que si me publican o no. Cada quien tiene que buscar su propio estilo. Y si publica una primera novela, escribir la segunda o la tercera o la cuarta, hasta donde le de la mano, si no publica la primera, intentar mover la segunda o la tercera, si no publica nada, seguir escribiendo ¿y si se muere inédito, incomprendido, porque nadie entiende lo que quiso decir, porque se le cae el pelo y se pone panzón, porque ya nadie lo toma en cuenta, porque está decepcionado, porque le desagrada el mundo y la vida, pues nada. Es así de simple.

Guillermo Barquero dijo...

Comento de nuevo, porque leí unos comentarios acerca del blog de Thays. Para mí es una página de consulta diaria, y una de las pocas que actualiza las noticias literarias casi en tiempo real (con respecto a lo que se publica en otros lados, claro está). No hace mal Thays al informar, en ningún momento él dice que todo lo que pone en su blog debe ser leído como absolutas obras maestras; el lector avezado no puede inventarse el cuento de que en las obras, por poner un ejemplo, de autores del Bogotá 39, se esconde una maestría a lo Cortázar o Beckett: por supuesto que sus posts son un reconocimiento de amistad, no una crítica literaria profunda, lo cual no tiene nada de malo. Su blog es de noticias, ya cada quien sabrá si lo sigue como recomendaciones, o nada más se entretiene con él. Hay blogs no solo informativos, sino de crítica, que igual guardan su atractivo y a los que hay leer como lo que son.
Ninguno de los dos tipos es malo solo por existir.

Anónimo dijo...

de acuerdo Sentenciero, e interesante el comentario de Mario Salazar
slds.
R

Anónimo dijo...

Al anonimo que empieza su comentario con la frase "No entiendo nada": yo creo que entiendes todo o casi todo.

LuchinG dijo...

Un conservador no necesariamente es conformista o mediocre, como, podrìamos decir, no lo fueron los samurais del siglo 19. Tal vez lo quew está matando la novela no son los consertvadores, sino los conformistas y mediocres; a éstos no veo por qué habrìa que dejar de señalarlos.

Anónimo dijo...

Lo mismo estaría pasando en el mundo del arte plástico si los compradores fueran un gran número de personas no-especializadas (esto lo sé de primera mano por el amigo de un amigo), de modo que la queja de Gustavo es una queja en contra del libre mercado. Un momento, ¡sí está pasando! La diferencia es que las artesanías y los cuadros con perros jugando poker no llegan a los museos, ni reciben premios, ni los entrevistan, ni les pegan el título de arte. Un mercado no explotado, no suena nada mal...

Anónimo dijo...

Escribí en el blog de tu amigo Ybarra para comentar la foto en la que sale con Alarcón, luego de haber despotricado acerca de él. Le hice un comentario que hacía referencia a sus opiniones vertidas lel 8 de octubre, si no me equivoco. No lo puso.
El cobarde no lo puso. Así que ahora le envié este comentario que espero lo coloque.

¿Oye, Ybarra cobarde, por qué no pones mi comentario? No digo nada malo ni nada que sea falso, solo digo lo que tú dijiste de Alarcón en tu post del 8 de octubre del año pasado acerca de la película "Vidas paralelas". Dijiste:
"De esta forma es gracioso (y me hace recordar a los novelistas de salón: Alonso Cueto, Santiago Roncagliolo y Daniel Alarcón a quienes Dante Castro ha desbaratado y desplumado literariamente como si fueran pollos de un mercado)"
Le dijiste "pollo de mercado", "desplumado", "escritor de salón"... y has dicho otras cosas, que muchos te hemos escuchado decir sobre las mesas, al igual que al hipócrita de Inocente (que no tiene nada de inocente el camarada).
Ahora, yo me pregunto... ¿Alarcón se sentaría con ustedes en una mesa si supiera lo hipócritas que son? ¿Le has dicho en su cara lo que en realidad piensas de él, o por lo menos la mitad o la décima parte?
No seas cobarde, Ybarra y pon mi comentario, ¿no?

Anónimo dijo...

Homenaje merecido a Ribeyro en la Cancillería, pero por qué siempre la dupla de oro, Cueto y Ampuero. ¿Es que no hay más escritores en el Perú? Y la Cancilería es reincidente, siempre Cueto y Ampuero, son sus caseritos. Niño de Guzmán era más de Ribeyro que Cueto y Ampuero.

LuchinG dijo...

Denuncias un crimen, afirmas ser testigo de excepción, pero cuando te preguntamos quiénes son los asesinos, respondes que ellos tienen todo el derecho del mundo de disparar a voluntad. Conclusión: tus términos son exagerados, en realidad la novela es un dinosaurio que se está extinguiendo -legítimamente- aplastada por su propio peso.